De acuerdo con previsiones del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM, las condiciones del fenómeno El Niño ya desaparecieron y aunque hay posibilidades de circunstancias neutras en los próximos meses, existen las características, aún débiles, de La Niña. La probabilidad que se tiene hasta abril de este fenómeno es de 32 por ciento.
Cuando se presenta El Niño en el océano Pacífico ocurre que donde llueve poco, por ejemplo en las islas del Pacífico o frente a las costas de Perú y Ecuador, las lluvias se vuelven intensas e incluso hay inundaciones, mientras que donde antes llovía mucho las precipitaciones disminuyen, indican expertos de esa institución.
Explican que con La Niña, que corresponde a anomalías negativas en la temperatura superficial del Pacifico tropical centro-este, ocurren eventos climáticos contrarios a lo experimentado durante El Niño; por ejemplo, en algún lugar del Pacífico tropical como Australia, en vez de sequía durante El Niño, lloverá más de lo normal durante La Niña.
Frente a estas condiciones la Conagua espera para este año que en el Pacífico, donde la media histórica es de 15.2 huracanes, ocurran 14 huracanes, y que uno de los fenómenos sea intenso.
Sin embargo, al igual que en 2005 se espera una intensa actividad en el Atlántico, donde el Caribe y el Golfo de México serían las regiones del país más sensibles a estos fenómenos.
Hasta el momento se tiene un listado provisional de nombres para los ciclones que eventualmente se presenten: serían Andrea, Barry, Chantal, Dean, Erin, Félix, Gabrielle, Humberto, Ingrid, Jerry, Karen, Lorenzo, Melissa, Noel, Olga, Pablo, Rebekah. Sebastián, Tanya, Van y Wendy.
