Carne de conejo dietética
Ante las condiciones socioeconómicas actuales, una alternativa es la producción de carne de conejo, ya que presenta “grandes ventajas” para su explotación, pues en un espacio de 600 metros cuadrados se pueden producir más de 20 toneladas, indicó la presidenta de la Asociación Nacional de Cunicultores de México, María Magdalena Zamora Fonseca.
Otras ventajas para su explotación, añadió la veterinaria zootécnica, son que una hembra puede producir durante un año más de 40 kilogramos de carne de buena calidad a bajo costo; el conejo tiene un ciclo de gestación que dura 31 días, rápido desarrollo, posee elevada tasa de fertilidad y de fecundidad, llegando a parir de 8 a 12 gazapos por camada y con una capacidad de parir hasta siete veces al año
La alimentación de esta especie –agregó la especialista– puede ser a base de forrajes y producir carne con 20 o 22 por ciento de proteína, altamente digestible, baja en grasa y en colesterol.
La carne de conejo es considerada como una de las más adecuadas para los niños pequeños, ya sea hervida o cocida con poco aceite, y también recomendada para personas de edad avanzada o con problemas estomacales o del hígado, así como para quienes deseen mantenerse en un peso óptimo, ya que esta es la carne más magra, por lo que puede ser llamada la “carne dietética”.
Sin embargo, aunque la demanda es mayor que la oferta, según un estudio de mercado realizado este año por medio del Plan de Fortalecimiento para los Comités Sistema Producto, financiado por la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), existe problemas de comercialización por la carencia de rastros registrados o Tipo Inspección Federal, indicó Zamora Fonseca ante legisladores integrantes del Grupo de Trabajo para la Reforma Integral del Campo Mexicano.
La demanda de carne de conejo –precisó– rebasa las casi 20 mil toneladas que se producen, informó Zamora, pero la cunicultura no se considera como una actividad sujeta de apoyo dentro de los programas de fomento ganadero, y únicamente se apoya a productores de subsistencia, por lo que los productores cunícolas con más de 100 vientres no pueden acceder a los programas de desarrollo rural.
Por lo anterior, propuso que en la Reforma Integral del Campo Mexicano se señale que dentro de las especies que pueden ser apoyadas por los programas de Alianza para el campo, se consideré a los conejos, para que en las entidades federativas se estimule esta actividad productiva y la formación de los comités sistema producto estatales.
