Pecuario y Pesquero

¡Hay ostión certificado!

 

La calidad del ostió mexicano es mejor que la de otros países productores, aunque su precio es menor en 50% del procedente de mercados asiático o estadounidense. Huracanes y derrames en la Costa Este de los EU afectaron las granjas de esa nació, lo cual abre una gran oportunidad para el producto mexicano que se encuentra a unas horas, pero requiere más promoción y apoyo financiero.

El cultivo de ostión en aguas certificadas es un negocio rentable, pero requiere de mayor promoción para la apertura de mercados; así como de acceso al crédito para extender la producción.

El mercado natural para la exportación de ostiones mexicanos es Estados Unidos, particularmente los estados de California y Nevada, por la cercanía que representa enviarlos del centro de producción al punto de venta. Las únicas entidades que cultivan el ostión en México y que cuentan con aguas certificadas son Sonora, Baja California y Baja California Sur.

La producción de ostión silvestre –el que se captura en el mar- en México es de aproximadamente 50 mil toneladas anuales, mientras que de ostión cultivado en aguas certificadas asciende a sólo 3 mil 500 toneladas, pero es el único que puede ser exportado.

Juan Carlos Lapuente, presidente del Consejo Nacional Ostrícola (CNO), que agremia alrededor de 250 productores de ostión de las entidades certificadas, señala que la organización está trabajando en una campaña de promoción y posicionamiento del producto en los Estados Unidos, porque a pesar de que han logrado colocar mil 500 toneladas al año de ostión fresco en ese mercado, y de que han desplazado a otros competidores de países asiáticos –principales productores del cultivo-; esto ha sido a través de una competencia de precios.

La calidad del ostión mexicano es mejor que la de otros países productores, pero su precio está 50 por ciento por debajo con relación al de otros ostiones de origen asiático o estadounidense. Mientras que el ostión mexicano se vende en 3.20 dólares la docena, el de origen asiático se cotiza al doble, alrededor de 6 ó 7 dólares, equivalentes a 75 pesos mexicanos, detalla.

El 50 por ciento de la producción de ostión cultivado se exporta y el resto se destina al mercado regional, pero los productores no quieren desatender el mercado interno, porque el producto es muy susceptible ante contingencias climatológicas y sanitarias, ya que si se presenta un evento de esa naturaleza, las autoridades de Estados Unidos podrían negar el acceso del ostión mexicano y se quedaría la producción parada y los productores no tendrían ingresos, refiere el presidente del CON.

Carlos Lozoya Sánchez, gerente del CON, platica que los productores que pertenecen a dicho organismo realizaron un estudio de mercado en la Unión Americana que les permitió conocer cuáles eran las áreas de oportunidad para colocar su producto en ese país.

Encontraron que las afectaciones que causó el huracán Katrina, que destruyó alrededor del 90 por ciento de las granjas acuícolas productoras de ostión de la Costa Este de los Estados Unidos, donde se obtiene 75 por ciento de la producción ostrícola, generó una demanda que tenía que ser atendida, principalmente en los estados de California y Nevada.

Los pronósticos del estudio revelaron que tardaría entre 8 y 9 años la recuperación de la producción ostrícola norteamericana. Sin embargo, años más tarde cuando el sistema de producción del Golfo se estaba recuperando, los derrames petroleros de la compañía British Petroleum perjudicaron nuevamente granjas acuícolas, no porque el petróleo haya llegado a las cestas de producción, sino que el gobierno estadounidense liberó presas para impedir que el agua contaminada llegará a la costa. Ello provocó que la concentración salina disminuyera y que los ostiones se murieran; aún están en un periodo de recuperación.

Sin embargo, el gobierno de los Estados Unidos impone medidas muy estrictas para la importación de moluscos como el ostión, por lo que se requiere de una certificación de las aguas en que se captura o produce; así como de estrictos controles sanitarios y de inocuidad.

Mercado

Uno de los objetivos del CNO es promover y posicionar el consumo de ostión mexicano en el mercado estadounidense, para ello trabajan en un proyecto llamado “Oysterland” (La tierra del ostión), y se trata de un pabellón virtual que muestra el proceso completo de producción del ostión y del cumplimiento de todas las normas de calidad, sanidad e inocuidad.

Carlos Lapuente dice que la meta a mediano plazo, añade, es posicionar el ostión en Estados Unidos y conseguir un mejor precio, de esta forma crecerán las utilidades que permitirán invertir y crecer los cultivos.

Desde 1975 se cultiva el ostión en Baja California, se introdujo una técnica japonesa, que consiste en una tira de conchas que se coloca en agua marina; en las conchas se pegan las larvas y comienzan a crecer. Con este esquema no se tiene mucho control en el desarrollo de los animales y en el rendimiento productivo.

Hoy día los productores certificados están incorporando una técnica de producción francesa, que permite la cultivar individualmente cada ostión, esa característica le da una mejor presentación al producto. También permite alcanzar mejores rendimientos y un menor índice de mortalidad.

Asimismo, en las entidades que cuentan con aguas certificadas se produce una especie de ostión de origen japonés que desarrolla más carne y que crece mucho más rápido. Mientras que el ostión japonés, en condiciones óptimas de clima, nutrientes y limpieza del agua se tarda en crecer de 12 a 14 meses; las variedades silvestres tardan hasta dos años y con altas probabilidades de estar contaminadas.

Las empresas que exportan ostión a Estados Unidos deben etiquetar todo el producto. La etiqueta cuenta con información referente al lugar, forma y fecha de producción. Desde que se extraen los ostiones se someten a una cadena de frío muy controlada.

Al momento de cargar los camiones se toma la temperatura del producto; durante todo el trayecto y hasta llegar a su destino, los termómetros digitales instalados en la cabina registran todas las variaciones en la temperatura, si se presentaron variaciones muy grandes los clientes o las autoridades no permiten el consumo del producto.

Mostrar más

Articulos Recientes

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Back to top button