México seco: 60% de su territorio aún padece algún grado de sequía
El pronóstico del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) señala que en los meses de junio, julio y agosto, las lluvias en el país estarán por debajo del promedio histórico, 778.8 milímetros (mm) y se prevé que no lloverá lo que se registra tradicionalmente en este periodo, ya que al 30 de mayo la precipitación era de apenas 124.1 mm. La normalización de las lluvias se espera hasta octubre.
El año pasado fue el año más seco en 70 años, con 697.1 mm, y hoy las presas del estado de Sinaloa, “son las que menor almacenamiento conjunto en el país sostienen, con menos del 7.5 por ciento de llenado conjunto; esto implica reducidas expectativas de aprovechamiento para el siguiente año”, advierte un reporte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
En Baja California las presas están al 36.2 por ciento; en Sonora 50.3 por ciento y en Chihuahua 44 por ciento; hay gran mejoría hacia el sur sureste, pero en la Península el registro es del cero por ciento.
José Luis Luege Tamargo, director general de la dependencia detalló, en rueda de prensa, que en el Noroeste del país, en general, las principales presas se encuentran al 50 por ciento de su capacidad, lo cual consideró un balance positivo ya que se reconvirtieron cultivos que usan menos agua, esto derivado de una negociación entre autoridades y productores de unidades y distritos de riego.
Sin embargo, matizó, los almacenamientos en Sinaloa están al 10 por ciento y la situación más crítica está en Durango, Zacatecas, Chihuahua, Coahuila y parte de Sonora. En las cuencas del centro, en estados como Guanajuato, hay almacenamientos al 20 por ciento.
El funcionario federal especificó que en 22 estados del país aún hay presencia de sequía –condición que ha mejorado aun cuando sigue presente–, pero son cinco los que presentan una situación más crítica.
En tanto, Adrián Vázquez Gálvez, coordinador general del SMN, dependiente de la Conagua, expuso que el pronóstico de ciclones tropicales, tanto en el Pacífico como el Atlántico es de 13 en cada uno de los océanos, por debajo del promedio, y el total de ondas tropicales –que aportan la mayor cantidad de lluvia al territorio nacional– será de 32, pero su presencia ha sido menor que en otros años.
Las lluvias registradas hasta el momento, derivadas del huracán Bud, generaron acumulaciones en Jalisco, Colima y Durango, pero aún con los efectos de un posible monzón en el Noroeste, difícilmente se podrían mitigar las condiciones de sequía.
Sin embargo, Adrián Vázquez comentó que aunque las perspectivas para verano no vislumbran una disminución de la sequía, que lloverá menos a lo normal, “un huracán puede cambiar la historia”.
Estamos pasando –explicó– de un año Niña a un año neutro y hay posibilidades para finales de año que se llegue a una condición de Niño, que propicia lluvias invernales fuertes en el Noroeste y sequía en el sur.
Hoy, anotó, vemos con preocupación, sobre todo la parte del Noroeste del país donde se produce gran cantidad de alimentos, que la falta de agua también genera afectación económica. En esta zona con un régimen muy racionalizado continúa bien su actividad, pero es urgente que se mejoren depósitos y reservas, porque en lo que resta de junio no lloverá lo que se acostumbra, para julio habrá mejoría y en agosto una leve recuperación, aunque no por encima de lo normal; algunos pronósticos señalan que en octubre se normalizarían las lluvias.
