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Movilización campesina y sindical exigió cambio de modelo económico y más apoyo al agro

 

Organizaciones campesinas y sindicales de todo el país se congregaron en el Ángel de la Independencia para marchar hacia el zócalo de la Ciudad de México y protestar en contra de los gobiernos neoliberales, la desatención al campo, la carestía de los alimentos y servicios, y la liquidación de miles de trabajadores de instituciones como Luz y Fuerza del Centro y la aerolínea Mexicana de Aviación.

Simpatizantes del partido Revolucionario Institucional (PRI), unos, y del Partido de la Revolución Democrática (PRD) otros sectores unieron sus voces para negarle sus votos al Partido Acción Nacional en las próximas elecciones federales del mes de julio y exigir un cambio de modelo económico que atienda las necesidades de los productores rurales, puesto que casi el “50 por ciento de los alimentos que se consumen en el país se importan”.

En un martes nublado que amenazó con lluvia desde temprano y que cumplió con una llovizna tupida justo cuando los dirigentes de la marcha anunciaron su posicionamiento político de repudio a la gestión del presidente Felipe Calderón.

Los miles de asistentes que congregaron antes de las cuatro de la tarde en las inmediaciones de la Avenida Paseo de la Reforma se mostraron animosos, extendían sus pancartas, coordinaban las consignas y definían su posición dentro del contingente. Como ocurrió el año pasado, en una edición previa de esta marcha de protesta, la descubierta encabezada por diputados, senadores y dirigentes sindicales y campesinos, quedó obstruida por otros asistentes que, desesperados, comenzaron el recorrido.

Electricistas, telefonistas, campesinos, pilotos, sobrecargos y obreros se fusionaron durante el trayecto a la Plaza de la Constitución. Aunque animosos, algunos productores agrícolas ya mostraban rostros de cansancio antes de comenzar el mitin, puesto que ya tenían varios días protestando en otros frentes, como la Secretaría de Agricultura.

Pasadas las 5 de la tarde, los inconformes coparon la plancha del Zócalo. El templete, ubicado frente a Palacio nacional ya los esperaba con discursos de protesta.

Los líderes de la movilización por la soberanía alimentaria y energética, derechos de los trabajadores y libertad democrática, tomaron la palabra, entre ellos Gerardo Sánchez García, dirigente de la Confederación Nacional Campesina (CNC), quien insistió en la necesidad de un cambio de gobierno que atienda las necesidades de sus agremiados.

Una vez que el líder cenecista terminó su participación y conforme pasaron los minutos los simpatizantes de dicha organización abandonaron el recinto. La lluvia se hizo presente y otros asistentes decidieron buscar refugió.

Sólo los más cercanos al templete aguantaron estoicos, puesto que en el momento en que Fernando Perfecto, dirigente de la Asociación Sindical de Pilotos de Aviación (ASPA), leyó el posicionamiento del movimiento arreció la llovizna. “tanto tiempo sin agua en el campo y mira donde nos vino a caer, comentaban de forma generalizada los campesinos que se protegían del agua a las afueras del palacio de gobierno del Distrito Federal.

A las seis y media de la tarde, ya sin luz de día, los asistentes se apresuraron a abordar los autobuses que los trajeron a la marcha y que los devolverían a sus lugares de origen.

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