Pequeños agricultores pueden contribuir a reducir importaciones de granos
La nueva administración federal debe voltear a ver a los productores pequeños y mediados, quienes hoy producen a menos del 50 por ciento de su potencial, pero que con métodos tradicionales pueden aumentar rendimientos y contribuir a reducir las importaciones de granos, que este año costará a México unos 4 mil millones de dólares(mdd).
Nuestro país puede aumentar su producción, en la misma superficie cultivada en la actualidad, de 23 a 33 millones de toneladas en 10 o 15 años, lo que eliminaría el déficit de 10 millones de toneladas de maíz que importa cada año, por lo que paga 2.5 mil mdd, anota el estudio Factibilidad de alcanzar el potencial productivo de maíz de México, realizado por los investigadores Antonio Turrent Fernández, del INIFAP, Timothy Wise y Elise Garvey, ambos de la Universidad de Tufts.
En entrevista, Turrent, Fernández, también presidente de la Unión de científicos comprometidos con la sociedad, señaló que las importaciones de granos equivalen a 50 mil millones de pesos, dinero que se irá a los bolsillos de los productores estadounidense, cuando se podría invertir en México para incrementar la producción, ya que cada peso para sector primario produce entre 3 y 5 pesos para el resto de la economía.
México cuenta con 3 millones de agricultores comerciales y 5 millones de productores tradicionales; los primeros producen en promedio 7 toneladas por hectárea –Sinaloa cosecha 10 toneladas—y ya están modernizados y los transgénicos no van a añadir más volumen a su producción; se proyecta sembrar 600 mil hectáreas con éstos, que son los mismos que, según investigadores franceses, provocaron cáncer y males renales en roedores.
Las proyecciones señalan que México demandará 39 millones de toneladas de maíz en 2025, el problema es que hoy uno de cada 3 kilos viene de afuera y con la tendencia actual importaremos 50 por ciento del maíz que consumimos, cuando el país tiene todo el potencial de producir lo que demanda, anota Turrent.
Un mito –remarca el investigador agrícola– ha sido que el minifundio no puede ser productivo, cuando países como China y Vietnam con parcelas promedio menores a una hectárea, pero con acompañamiento del Estado, incrementan sus rendimientos.
En el marco del Foro Autosuficiencia maicera, ordenamiento de mercados y lucha contra monopolios agroalimentarios, organizado por la ANEC, expuso que México necesita tomar experiencias como la de Brasil, donde existen dos secretarías de agricultura, una que atiende a los productores comerciales y otro para los pequeños y medianos.
Nuestro país puede duplicar su superficie regada, dado que hay reservas de agua que no estamos aprovechando, ya que de mil 500 m3, escurren al mar unos 200 m3, si se destinara a riego se podían regar 5 millones de hectáreas adicionales a las 6.3 millones con las que se cuenta hoy.
En entrevista, Timothy Wise, director de Políticas de investigación del instituto para el desarrollo global y el ambiente, de la Universidad de Tufts, consideró que México puede recuperar su autosuficiencia en maíz, con extensionismo, capacitación, técnicas tradicionales, con inversión en riego e infraestructura.
El problema de los gobiernos saliente y entrante es que se apuesta a la modernización de la agricultura y el temor es que se este apostando de nuevo a los grandes agricultores, aunque la brecha productiva esta con los pequeños y medianos, apunta.
Hay un consenso internacional y en el mismo G-20 se habla de que es en este sector donde hay que invertir, sobre todo en riego en el sur-sureste, lo cual podría duplicar la producción nacional de maíz, recalca.
