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Feminización del campo: trabajan en la milpa y la cocina

Hacemos el quehacer y la cocina, y los hombres todavía nos dicen: vamos a arrancar frijol, vayan a leñar o cuidar chivos; tenemos que correr a hacer tortillas y ellos sólo se dedican a limpiar la milpa: mujeres de Chichiltepec, Puebla.

María Guadalupe Bolaños Ceja**.

En Chichiltepec como en la mayoría de las zonas de agricultura tradicional, las campesinas abandonaron sus estudios a los 10 años en promedio, por lo que empezaron a laborar en el campo. Otras se casan jóvenes, lo que a su vez provoca que haya una transformación en el trabajo que realizan en casa y fuera de ella.

En esta comunidad se observó que el número de posesionarios beneficiarios del Procampo es de 158, de los que 118 son hombres y 40 mujeres, es decir 26 por ciento de los beneficiarios del programa. Aunque este porcentaje no se puede considerar muy alto, representa una importante presencia de las mujeres en las parcelas de Chichiltepec.

Además, en nuestra investigación observamos que la mayoría de los hombres que reciben Procampo son asistidos en el trabajo agrícola por sus esposas. Con estos datos se constata la presencia femenina no sólo en los núcleos agrarios, sino también como beneficiarias de programas públicos como Procampo, que es considerado exclusivo para varones.

Otra causa para que en Chichiltepec el trabajo de mujeres vaya en aumento, es que muchas de ellas no se casaron o sus hermanos, esposos y/o hijos migraron hacia las ciudades cercanas o los Estados Unidos.

Además cuidamos chivos

Respecto a los trabajos que realizan en el campo las mujeres de Chichiltepec, estos se transforman conforme a sus edades, las niñas sólo cuidan el ganado, ya que la mayoría de las familias de Chichiltepec han tenido chivos desde hace más de medio siglo.

Cuando los varones de Chichiltepec limpian milpa, generalmente son asistidos por las mujeres -esposas y/o hijas-. A lo que más se dedican las mujeres de Chichiltepec es a cuidar a los chivos cuando salen a pastar, también deshierban la tierra cuando se va a sembrar.

“A veces vamos a arrancar el frijol o ayudamos a los hombres a cortar el zacate”, dice Doña Alfonsina, quien tiene dos hijas y al igual que ella pastorean a los chivos y ayudan a los hombres a trabajar en el campo.

Otras de las actividades que realizan están: “sembrar o a abrir el surco para sembrar maíz y frijol”. El surco lo abren con el azadón que usan en sustitución del arado. Cuando utilizan el arado, se lo prestan sus hijos.

Doña Leonila reflexiona sobre el reparto de actividades en el campo, pues ella de niña cuidaba a los chivos cuando estos comían y ahora además de las labores domésticas asiste a los hombres en el campo; “hacemos el quehacer, o la cocina y luego los hombres todavía nos dicen: vamos a arrancar frijol, vayan a leñar, ellos sólo se dedican a limpiar la milpa, eso todo el día y nosotras tenemos que correr a hacer las tortillas aquí en la casa -como nosotras molemos- a hacer la comida, trabajamos más nosotras que ellos”.

Existen otros casos como el de la señora María Luisa, combinaba el pastoreo de los chivos con asistir a sus padres en las labores agrícolas, ella cuidaba chivos, arrancaba hierbas donde sembraba su papá y recolectaba leña. El único cambio en su vida que observó se dio cuando se casó, pues empezó a cuidar al ganado mayor específicamente toros. Señaló que el arado es un instrumento muy pesado para las mujeres, razón por la cual ellas no lo utilizan, comentó que las mujeres que tienen toda la responsabilidad sobre la tierra, contratan mozos para que lleven el arado a la hora de sembrar.

Muchas de las mujeres de Chichiltepec mostraron su agrado por las actividades agropecuarias, aunque suelen ser agotadoras a ellas les gusta realizarlas, como doña Minerva, a quien de niña sus papás la mandaron a trabajar en el campo; no se le hacía pesado obedecer a sus padres, el trabajo le gustó, sobre todo cuidar a los chivos. Lo que ahora hace es: limpiar la milpa, deshierbar, cuidar al ganado y acarrear leña para consumo de su familia.

Con el paso del tiempo, las mujeres están participando más en las labores agropecuarias, tanto en la toma de decisiones con el marido y en el trabajo dentro de la parcela, esto se refleja en la vida de doña Minerva, pues su esposo tuvo un accidente y quedó discapacitado.

Las mujeres rurales que se dedican a las labores agropecuarias en Chichiltepec y que son responsables de la producción, contratan al yuntero para que lleve el arado, ese es el caso de la señora Aurora Sánchez que ahora es responsable de su tierra. De niña ayudaba a su madre sembrando y limpiando la milpa. Las diferencias que ella nota en su trabajo agropecuario de cuando era niña y ahora es que: “antes, bordaba y cuidaba a los chivos, ahora cuida animales, limpia milpa, siembra y limpia frijol. “Medio día en el campo y medio día llevando a los chivos en el monte, pues mi nuera me ayuda en la casa”.

Tras escuchar estas voces concluimos que las mujeres campesinas acceden a la tierra por dos causas: la herencia o porque sus esposos y/o hijos migran; en el caso de Chichiltepec, la principal razón es que los jóvenes están saliendo de la región.

En México aún falta mucho para garantizar la paridad de género en las zonas rurales, pues no debe ser necesario que el hombre tenga que salir de la comunidad o que los jóvenes no se interesen por la actividad agrícola para que una mujer pueda acceder a la tierra. El problema radica no sólo en la falta de equidad, sino que otras dificultades para las mujeres rurales es también la pérdida de la rentabilidad de las actividades agrícolas y la subestimación del campesinado.

Las causas de la feminización agropecuaria y el impacto de estas siempre van a variar dependiendo de la región. Considero que algo que sí aplica en México es que la situación en el campo cambiaría si tanto mujeres como hombres tuvieran las mismas oportunidades para acceder a programas productivos y a obtener documentos que las acrediten como dueñas de la parcela.

** Artículo realizado a partir de los datos obtenidos para la Tesis de Licenciatura: “La feminización de las labores agropecuarias en Chichiltepec, Puebla, Estudio sobre la evolución del trabajo de las mujeres en las actividades agropecuarias en Chichiltepec, Puebla”.

** Socióloga egresada de la Universidad Autónoma Metropolitana. Unidad Iztapalapa.

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