El embutido de calamar gigante es una alternativa para la buena alimentación y contra la obesidad en México, porque es un alimento de alto contenido de proteína y bajo costo, que incluso en la playa se malbarata.
La empresa Alimentos Marinos y Campestres señala que dentro de la Cruzada Nacional contra el Hambre ofreció a la Conapesca, dependiente de la Sagarpa, este producto para encontrar la manera de hacer llegar a más personas esta proteína de bajo costo, con la idea de distribuirla a través de dependencias del gobierno o los DIF en los estados, sobre todo en los del sureste o donde se requiera.
El presidente del consejo de administración de la empresa, Alonso Julián García, expresa: “queremos llegar a sectores de bajos recursos y el precio al público será de siete pesos la pieza de 100 gramos, de tal manera que una porción de este alimento sano comparado con una papas fritas de 9 pesos, que es pura grasa y harina, es muy barato. “Queremos sustituir comida chatarra y meterlo a desayunos escolares”.
El embutido de calamar — que se comercializa con la marca Squiddy– tiene una vida de anaquel de un año, no requiere refrigeración, dado que su empaque es similar a una lata, ya que “le damos tratamiento térmico” al producto, además con el beneficio de que se puede preparar de diversas maneras.
El empresario explica que el calamar es un depredador natural muy voraz, que los pescadores tienen que capturar porque sino se come a otras especies, como el camarón o la sardina. Se llegan a pescar de 120 a 150 mil toneladas al año de calamar, “pero no tiene mercado, porque la gente no lo busca”.
Como no tiene demanda, los comercializadores lo compran muy barato a los pescadores; pero ya como embutido le damos valor agregado, estimulamos a los productores y en materia de salud combatimos la obesidad, el sobrepeso y la desnutrición.
Recuerda que el año pasado en playa les querían pagar a los pescadores de 2 a 3 pesos por kilo, cuando debería recibir arriba de diez pesos, de tal manera que si agregamos el proceso de transformación y congelamiento se vendería al consumidor final entre 16-18 pesos.
La planta de la empresa tiene una capacidad instalada de una tonelada por hora y durante el primer año estima transformar de mil 200 a mil 500 toneladas, detalla Julián García.
El calamar es una especie que se localiza en el Mar de Cortés, Baja California, Sonora y Sinaloa.
La empresa tiene sede en Jalisco, donde desde hace 35 años produce carnes y de ahí surgió la idea de producir el embutido de calamar, platica Alonso Julián.
