Seguirá prolongándose erradicación del hambre en México, experto
La Cruzada nacional contra el hambre “es un fracaso”, expresa lacónico el especialista en nutrición Abelardo Ávila Curiel, quien fue miembro del comité de expertos de dicha iniciativa.
En México los niños que tienen un déficit de nutrición o desnutrición son un millón y medio y están localizados en zonas de pobreza y de alta marginación. Esto aunado a problemas de obesidad complica el problema, señala.
El también investigador del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán plática que con el trabajo que realizó, con un equipo de colaboradores que participaron en la Cruzada, en la Montaña de Guerrero se logró abatir en 90 por ciento de la mortalidad infantil en el primer año de la Cruzada, en el año 2013.
Sin embargo, cuando se dio el cambio de titular de la Sedesol –el relevo de Antonio Meade por Rosario Robles– se suspendió el programa en esa región y, de acuerdo con los promotores comunitarios, dicho índice volvió a repuntar.
Abelardo Ávila recuerda que se llegó a tener una cobertura en 120 localidades y logramos abatir la mortalidad esperada, cuya tasa anualizada era de 60 niños que iban a morir. Durante ese lapso de trabajo en las comunidades sólo tuvimos tres defunciones, una de ellas por picadura de alacrán. “Prácticamente abatimos la mortalidad”.
Con el cambio de administración –remarca– muchos de los proyectos que se echaron a andar se terminaron. “Tiraron la Cruzada. No sólo tiraron el agua sucia de la la bañera; lo hicieron con todo y niño”. Desecharon mucho de lo que se había trabajado como modelo integral para poder hacer un cambio integral en el tema alimentario mexicano y para estructurar una política contra el hambre.
Los funcionarios cambiaron y también las propuestas para reestructurar los trabajos comunitarios. Todo quedó cancelado, subraya.
El especialista en temas de nutrición expresa: “Esto es doloroso, decepcionante. La Cruzada abandonó la visión de desarrollo integral y las reuniones del grupo intersecretarial”.
Por ello, Curbelo Ávila reitera: “la Cruzada es un fracaso y la tendencia es que va a seguir prolongándose la erradicación del hambre; espero que no siga creciendo”.
En México -reconoce que hay una tendencia secular a que vayan mejorando los índices de pobreza y atraso. Ahora de lo que se trata es de garantizar todos los derechos y generar todo el bienestar para la población lo antes posible; pero nos vamos a tardar más en solucionar los gravísimos problemas de atraso pobreza y hambre.
Los indicadores mezclados dan la idea de que hay mejoría si promediamos el estado de nutrición de cero a cinco años, pero si nos centramos en los primero dos años vemos que no ha mejorado. El problema es más grave, porque los desnutridos pasan a ser obesos con las transferencias económicas, porque muchos beneficiarios las utilizan para comprar “alimentos chatarra”.
Al final de la conversación, Abelardo Curbelo lamenta la forma en que se canceló su participación en el grupo de expertos de la Cruzada nacional contra el hambre : “ni siquiera tuvieron la gentileza de tomarnos en cuenta, de avisarnos que ya no existía Cruzada”.
