Descubren investigadores de la UAG propiedades del té de romero como coadyuvante del tratamiento de la diabetes mellitus tipo 2
El té de romero podría ayudar a disminuir los efectos de la diabetes mellitus tipo 2 y mejorar la salud de pacientes que sufren éste y otros padecimientos crónico degenerativos; la información parte de la investigación realizada por la Asesora de la Sociedad Científica de Estudiantes de Medicina y Profesora del Programa Internacional, de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG), Dra. Raquel Báez Lozano.
La especialista explicó que, según los resultados de la indagación médica, el consumo de dos litros al día del té protege al ácido desoxirribonucleico (DNA), mejora y disminuye el porcentaje de lípidos en la sangre significativamente y baja el riesgo de sufrir un infarto o un accidente vascular-cerebral.
“Trabajamos con el IMSS y con el departamento de posgrado de Farmacología de la Universidad Autónoma de Zacatecas; la investigación se enfocó a pacientes con diabetes mellitus tipo 2 y estudiamos el efecto que tiene el té de romero en su enfermedad. Buscamos que se proteja al DNA ya que éste es dañado por enfermedades crónico degenerativas, como diabetes, hipertensión, problemas cardiacos o congénitos”, explicó la Dra. Báez Lozano.
Comentó que también se deshidrató la planta y encapsuló para consumo de los pacientes y practicidad al administrarla en dosis.
Beneficios económicos
Esto es un parteaguas. Probamos el té en personas que sufrían diabetes mellitus tipo 2 que usan insulina regularmente y podría tener grandes beneficios tanto clínicos como económicos para el sector salud y la población. Ya tenemos propuestas de laboratorio, el propio IMSS está interesado ya que se reducirán los costos para la atención de los pacientes a prácticamente nada”, manifestó la Dra. Báez Lozano.
“El gasto diario que realiza por tratamiento una persona con diabetes mellitus tipo 2, que se estimó en nuestra investigación, es de 800 a mil 500 pesos diarios, dependiendo de la calidad y marca de la insulina que usa. Mientras que un tratamiento con té de romero reduciría el gasto a 3.50 pesos mexicanos diarios”, detalló. Y agregó que continuarán con su investigación.
Presentaron resultados en Bolivia
La doctora presentó la investigación en Cochabamba, Bolivia, en el XXXI Congreso Científico Internacional de la Federación Latinoamericana de Sociedades Científicas de Estudiantes de Medicina (FELCOSEM) 2016 “Dolor y Cuidados Paliativos” que se realió del 6 al 10 de septiembre.
El nombre de su investigación es “Efecto anti-micronucleogénico y citoprotector del extracto acuoso de romero (Rosmarinus officinalis) en pacientes con Diabetes Mellitus tipo 2”.
El protocolo entrará en un concurso que se realizará en el evento, sólo tres trabajos de investigación entraron al congreso. De ser aceptado también será publicado en revistas académicas y científicas.
Será mostrado a estudiantes, académicos, profesionales y sociedades científicas de medicina de toda Latinoamérica.
Alumnos presentarán caso clínico
Mientras la Dra. Báez Lozano presenta su investigación, los alumnos Juan Carlos Navia Velázquez, estudiante de sexto semestre y Osvaldo Redondo Mendivil, de quinto semestre de la Facultad de Medicina de la UAG, presentarán un caso clínico en el mismo Congreso Científico de Bolivia.
El expediente que presentarán se denomina “Estudio Clínico, Bioquímico y Molecular de un Paciente Mexicano con Hipercolesterolemia Familiar Homocigota”. Explicaron que el caso presenta a una paciente de 17 años la cual padece la enfermedad ya que ambos padres sufren de hipercolesterolemia familiar heterocigota en sus genes, el gen mutado fue heredado por ellos lo que causó la hipercolesterolemia homocigota.
En términos básicos, los pacientes nacen sin receptores que captan el colesterol “malo”, al no tenerlos, no lo dirigen al hígado, donde se metabolizan las grasas. Al no existir tales receptores y no ingresar al hígado, se acumula en las arterias y aumenta el nivel de éste en la sangre lo que causa placas arterioescleróticas dentro de los vasos sanguíneos. Aunado a ello, las células al no registrarlo, generan el propio. Así el paciente sufre de “exceso de producción”. El riesgo de enfermedades cardiovasculares e infarto aumenta significativamente.
