Quedan 60 ejemplares/ Pesca ilegal de totoaba la principal causa: WWF
No obstante la estrategia del gobierno mexicano implementada para conservar esta especie, la más importante en décadas, en el último año se perdió el 40 por ciento de los ejemplares de vaquita marina, ya que la población es de apenas sesenta ejemplares, lo cual la pone en una situación de “inminente riesgo de desaparición”, advirtió el director general del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) en México, Omar Vidal.
En rueda de prensa señaló que la principal causa que amenaza esta especie endémica de México, es la pesca ilegal de totoaba, cuya vejiga natatoria (conocida localmente como “buche”) se vende como alimento exótico en el mercado chino a precios elevados.
La única forma de salvar de la extinción a la vaquita marina –recalcó– es el compromiso de los gobiernos de México para fortalecer la vigilancia y evitar la pesca ilegal de totoaba; el de los Estados Unidos para frenar el tráfico ilegal a través de su frontera y el del gobierno de China para desincentivar el consumo de totoaba –especie que comparte hábitat con la vaquita y también está en peligro de extinción.
Ante esta situación de inminente riesgo, la WWF recomienda a las autoridades cerrar en todas las pesquerías donde habita la vaquita marina, porque “no podemos perder una más”; extender la veda en forma indefinida; compensar a los pescadores y buscar alternativas viables para ellos y que una prioridad para la Gendarmería Ambiental sea la vigilancia para evitar la pesca ilegal de totoaba.
Recordó que en 2014 había 97 ejemplares de vaquita y disminuyó a 60 en diciembre pasado pero, “probablemente se redujeron 20 por ciento más debido a que fueron atrapadas y se ahogaron en la pesca descontrolada de la totoaba entre enero y abril de 2016”.
Todo esto, remarcó el directivo de WWF, no obstante los importantes esfuerzos del gobierno federal, de las acciones coordinadas de las autoridades ambientales y la Marina Armada de México, y de los centenares de millones de pesos invertidos para compensar a los pescadores, 70 millones de dólares. “Prácticamente se perdió un año en los esfuerzos para salvar a la vaquita”.
Omar Vidal recordó que en 30 años se han hecho esfuerzos importantes para recuperar la población de vaquita marina, pero éstos han insuficientes.
Aseguró que no obstante la etapa crítica para la vaquita marina, si es posible recuperarla como lo demuestra la experiencia de ballena gris o de lobos marinos. Agregó que con su extinción no sólo se perdería vaquita, sino que habría consecuencias para el entorno, ya que se ha convertido en “guardián de salud ambiental del Alto Golfo de California”.
Comentó que una dificultad es que los pescadores no se han interesado en usar redes de pesca que no afecten a la vaquita marina, aun cuando éstas han demostrado que sí funcionan.
El director general de WWF expuso que si se toman las medidas adecuadas la población de vaquitas marinas hacia el año 2050 podría llegar a 245 ejemplares. De lo contrario está destinada a la extinción.
¿Qué falló?
Entre las fallas que WWF observa que han llevado a este escenario está que continuaron las actividades pesqueras dentro del refugio; muchos pescadores siguieron utilizando redes agalleras para peces y camarón; existen inadecuadas capacidades de vigilancia para supervisar las actividades pesqueras; se presume que muchos pescadores siguieron capturando totoaba a pesar de que fueron compensados económicamente y quienes emplearon redes para proteger a las vaquitas no sabían cómo usarlas.
