El jefe de Negociación Técnica del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), Kenneth Smith Ramos, afirmó que el sector agroalimentario “para nada” estará marginado en las negociaciones del acuerdo”, dado que es un sector prioritario y del lado mexicano existe interés de avanzar en garantizar que no haya imposición de aranceles, cupos o barreras no arancelarias a nuestras exportaciones agropecuarias.
Luego de inaugurar las audiencias públicas sobre la modernización del Tratado de Libre Comercio para América del Norte (TLCAN), adelantó que México seguirá insistiendo en temas fitosanitarios y, por ejemplo, en el rubro porcino buscará que su contraparte estadounidense reconozca al país como libre de Fiebre Porcina Clásica (FPC) y que permita ampliar el acceso a otras entidades productoras de aguacate, como se ha venido planteando en negociaciones bilaterales.
A pregunta expresa de www.imagenagropecuaria.com, en el sentido de que si el agro tendrá peso en las negociaciones del acuerdo comercial, Kenneth Smith afirmó que el sector agropecuario es una de las “historias de éxito” del TLCAN, lo cual se refleja en que hemos incrementado nuestras exportaciones hacia Estados Unidos y sostenemos un comercio bilateral de 42 mil millones de dólares (mdd).
El funcionario federal, quien forma parte del equipo negociador de México con sus contrapartes de Estados Unidos y Canadá, subrayó que nuestro país apuesta a que el libre comercio continúe y no regresar a cualquier esquema que represente un retroceso con respecto a lo que tenemos en el comercio con Estados Unidos y Canadá.
“El sector agro es fundamental y buscamos mantener libre comercio y eliminar cualquier barrera de carácter no arancelaria que pudiera existir para éste y todos los sectores”.
En entrevista, Smith Ramos dijo que el TLCAN en los rubros de frutas y hortalizas es muy importante para nuestro país, porque nos han permitido ampliar las oportunidades para el agro y su ingreso al mercado estadounidense, el más competido del mundo.
Por otra parte, aseguró que en granos [donde México importa 10 millones de toneladas maíz amarillo cada año] no hay preocupación por parte de México y lo que se busca es que se mantenga un mercado abierto al cien por ciento con Estados Unidos,
Respecto a planteamiento de organizaciones campesinas –que se han manifestado en la ciudad de México– de sacar el capítulo agropecuario del TLCAN, Kenneth Smith comentó que dicho acuerdo ha traído beneficios al país, ya que con más de 20 mil millones de dólares de productos agrícolas, somos el principal proveedor en muchos productos del campo a los Estados Unidos y eso nos ha permito diversificar nuestra producción en áreas como fresas, berries, aguacate y tomate, y lo que tratamos de hacer es introducir mecanismos innovadores, que permitan a los micro y pequeños empresarios y productores aprovechar las ventajas que ofrece el tratado.
Rechazó que con el TLCAN únicamente se haya beneficiado al sector agroindustrial, dado que con una mayor producción agrícola mexicana hemos logrado diversificar y hacer que muchos productos tengan acceso a los Estados Unidos, lo cual beneficia tanto a pequeños como a grandes productores. “Queremos ampliar esa bases en nuevas regiones y que productores pequeños participen cada vez más”.
En ese sentido, añadió, estamos convencidos de que tenemos que seguir con una política de apertura comercial donde tengamos el acceso a territorio estadounidense, pero también necesitamos diversificar y buscar otras fuentes de proveeduría y de destino para nuestros productos del campo.
En general, anotó, tenemos un potencial muy grande en el TLCAN, somos el segundo comprador de Estados Unidos y esa nación es el principal destino de nuestras exportaciones. Es un mercado amplio y tenemos amplias posibilidades de seguir creciendo.
Hay sectores “bandera” como el automotriz y recientemente el aeroespacial; en áreas de manufactura avanzada, en equipo médico y biotecnología hay mucho potencial de seguir creciendo y convertirnos en el principal proveedor del vecino país.
