El mes de agosto se caracteriza por aportar más lluvia durante el año a nivel nacional, pero este año no fue así.
Diez ondas tropicales viajaron, al igual que el mes anterior, lejos del territorio nacional y su aporte de humedad fue mínimo, dejando las pocas zonas con lluvias por arriba de promedio debido a sistemas de bajas presiones.
De acuerdo con el reporte del Monitor de Sequía de América del Norte agosto fue otro mes sin influencia de sistemas ciclónicos cercanos a las costas nacionales lo que agudizó aún más el estrés hídrico. Aunado a la sequedad, las temperaturas nuevamente se incrementaron dejando a varios estados clasificados con el mes más cálido en sus registros.
De manera general, agosto de 2019 fue el mes más seco de acuerdo con datos de lluvias desde 1941. Se ubicó como el decimoquinto agosto más seco en los registros históricos, con 110.8 mm de lluvia a nivel nacional, que representa un déficit del 17.8 por ciento respecto al valor promedio (1981-2010) para un mes de agosto, que es de 134.7 mm.
Además fue el mes más seco en Tabasco, Tamaulipas y Veracruz, tres de los estados más afectados por la sequía, mientras que Hidalgo y Yucatán también tuvieron precipitaciones escasas que los ubicaron como el cuarto y sexto agosto más seco. Los estados que tuvieron un balance positivo de lluvias fueron los del Pacífico. Sinaloa registró su agosto más húmedo, mientras que Nayarit y Sonora quedaron lejos de los diez agostos más húmedos.
También el más cálido de acuerdos con los registros de temperatura que datan desde 1953, con un promedio nacional de 27.0 °C, 3.3 °C más cálido que el promedio de 1981-2010.
Estas condiciones climáticas provocaron el empeoramiento de las condiciones de sequía en las regiones más afectadas desde meses anteriores.
La sequía ha afectado zonas de producción de caña de azúcar y los mayores daños se concentran en la Huasteca potosina, el sur de Tamaulipas, Veracruz, Quintana Roo, Tabasco y Campeche, es decir, en todo el corredor oriente del país.
Se estiman pérdidas mayores al 40 por ciento en los rendimientos de la caña de azúcar y otra cantidad incluso no podrá ser cosechada por tratarse de pérdida total, de acuerdo con reportes de líderes locales.
Los efectos de la sequía continuarán reflejándose en los siguientes meses debido al probable desabasto de azúcar y quiebras de los ingenios y con ello la importación del endulzante. Además, en el norte de Veracruz, la falta de lluvias ha provocado que el nivel de la presa Chicayán sea el más bajo de los últimos cincuenta años. Las autoridades estatales han proveído de agua a la región con pipas, pero no son suficientes para la demanda tan alta porque no sólo se trata del consumo humano, sino de las actividades agrícolas y ganaderas.
En el sur de Tamaulipas se ha reportado la muerte de ganado, más del 90 por ciento del cultivo de soya se reporta en pérdida, situación que se ha empeorado por las altas temperaturas en la región. Hasta la fecha, las pérdidas económicas son incalculables para agricultores, pequeños productores, ganaderos y el sector pesquero.
