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En México alcanzar la autosuficiencia alimentaria en granos es posible

México tiene la capacidad de alcanzar la autosuficiencia alimentaria mediante la producción de maíz, frijol y oleaginosas que se requieren para una alimentación sana sin la necesidad de recurrir a la siembra de transgénicos, pues los organismos modificados genéticamente (OMG), sólo incrementan  el 0.3% de la producción, afirmó el doctor Alejandro Espinosa Calderón,  investigador del INIFAP.

 

Al participar en el primer Foro Campesino organizado por la Universidad Autónoma Chapingo (UACH), expuso que “lo único que se requiere es tener políticas públicas, que contemplen el extensionismo rural para los 2.3 millones de productores”.

Indicó que la producción en maíz es posible debido a que los 2.3 millones de productores cuentan con al menos una se tienen una variedad de semilla nativa y que están distribuidas en las diferentes regiones del país, aunado a las variedades mejoradas que los investigadores mexicanos, de diferentes instituciones han desarrollado, una diversidad genética que permite soportar el cambio climático.

Argumentó que el país puede producir más de los 10 millones de toneladas que se importan de grano: “De acuerdo a las declaraciones del doctor Turrent, los mexicanos podemos producir hasta 54 millones de toneladas, necesitamos 32, lo que necesitamos un gobierno patriota que apoye esa producción, una gran cruzada que permita a los productores tener semilla de maíces nativos”.

Durante el primer Foro Campesino, donde se abordó el tema “Más allá de los transgénicos”, el doctor Espinosa Calderón aseguró que se tienen probadas reservas de producción de maíz, lo único que se requiere es establecer programas que apoyen semilla accesible de los grupos que producen las semillas mexicanas para que lleguen al campo, con ello se prueba que México es grandioso para alimentar a las generaciones del 2050.

Explicó que el riesgo de que en México se autorice la siembra de transgénicos es que en Sinaloa de utilizarían 500 mil hectáreas para producir 5 millones de grano de maíz para la elaboración de tortillas, además de que se pueden contaminar las variedades nativas lo cual es un riesgo para la riqueza cultural de los mexicanos.

Comentó que en países como Argentina se utiliza transgénicos, donde se cultiva soya, es para controlar las malezas, pero se han detectado casos de cáncer en las personas que fumigan, además de que no ayuda en la producción de alimentos en el caso del país: “La milpa no necesita de los transgénicos porque no requiere de herbicidas, de ahí obtenemos quintonil, tomatillo, quelite, entre otros productos agrícolas”.

El investigador de tercer nivel en el Sistema Nacional de Investigadores (SNI), explicó que el verdadero problema que se genera al prohibirse la siembra de transgénicos es la gran pérdida millonaria para Monsanto, afortunadamente por el momento existe una moratoria para esta práctica, por ello, es importante que el gobierno federal atienda las voces de la Unión de Científicos, alrededor de 700, que están comprometidos con la sociedad y con el país, empeñados en hacer variedades de maíz  y otros cultivos.

Indicó que se requiere de una alimentación sana, fuera de los transgénicos: “Debemos regresar a la mexicanidad de la comida  a través del maíz, frijol, amaranto, chía, chile, donde están nuestra cultura, lo que nos identifica como mexicanos.

Destacó que el maíz es la especie más importante para la humanidad, cada año se cosechan mil millones de toneladas de grano en todo el mundo, seguido del trigo, que con 200 millones de toneladas a menos que el maíz.

Fuente: UACH

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