Crédito de banca comercial al agro, llave cerrada
La banca comercial lleva alrededor de 15 años de cerrar la llave del crédito porque en su “particular” percepción el sector agropecuario es de alto riesgo.
Del total del crédito destinado al sector rural por la banca de fomento y multilateral por 89 mil 843.2 millones de pesos a septiembre de 2008, una tercera parte proviene de la banca comercial con 29 mil 898.4 millones de pesos, donde la mayor parte lo ha otorgado Banorte, el único banco mexicano.
En 2004 la banca comercial otorgó al agro 19 mil 666.1 millones de pesos y a septiembre de 2008 alcanzó 29 mil 898.4 millones de pesos.
Banorte aumentó en mil por ciento el financiamiento al campo en siete años, al pasar de 2 mil 57.6 millones de pesos a 24 mil 423.9 millones de pesos de 2000 al 2007.
Mientras, su cartera vencida pasó de 9.3 millones de pesos a 153.5 millones de pesos, en ese lapso.
Financiera Rural otorgó créditos al sector por 7 mil 671.8 millones de pesos en 2004 y en septiembre del año pasado casi lo duplicó, revela el especialista José de Luna Martínez en un estudio.
FIRA a su vez, canalizó 42 mil 656 millones de pesos en 2004 y a septiembre de 2008 llegó a 44 mil 956.2 millones de pesos.
En los últimos siete años el fondeo en este importante banco de fomento ha crecido al 13.3 por ciento promedio anual.
Uno de cada 2 pesos del financiamiento al sector agroalimentario es fondeado o garantizado por FIRA.
En producción primaria este banco de segundo piso otorga financiamiento para inversiones fijas y capital de trabajo, arrendamiento y factoraje. También para acopio y almacenamiento otorga créditos de inventarios y prendarios.
Para transformación da factoraje a proveedores y arrendamiento financiero y en punto de venta promueve el desarrollo de proveedores, factoraje y bursatilizaciones de cartera, entre otros.
Otros bancos de desarrollo financiaron al agro con 772.3 millones de pesos en 2004 y al noveno mes del año pasado se redujo a 176.9 millones de pesos.
Del exterior el agro fue financiado por 790.5 millones de pesos contra 221.5 millones de pesos en ese periodo.
Así, el financiamiento de bancos de desarrollo, de instituciones bancarias comerciales y del exterior totalizó en 7 mil 556.7 millones de pesos en 2004 y se incrementó a 89 mil 843.2 millones de pesos en septiembre de 2008.
En un análisis Banorte señala que ese crecimiento de financiamiento se debe a la diversificación de sus programas para participar en el sector desde créditos corporativos hasta créditos masivos de alcance nacional, a través del Procampo, Fonaga, Promaf o las parafinancieras.
Una constante en el sector es que los productores agropecuarios consideran escaso el crédito al agro por parte de instituciones crediticias privadas. Los bancos comerciales sólo dan financiamiento a grandes corporativos y apenas atienden al 14 por ciento de la población, revela el Consejo Nacional Agropecuario (CNA).
Así, las instituciones crediticias han establecido una estrecha supervisión y mantenimiento de la cartera.
El Consejo Nacional Agropecuario revela que los bancos comerciales sólo dan financiamiento a grandes corporativos y apenas atienden al 14 por ciento de la población.
“Y ahora con la crisis los primeros que se han retirado del crédito al campo son los bancos comerciales extranjeros establecidos en el país”, agrega el CNA.
La banca comercial argumenta que hacer llegar el crédito a productores de bajos ingresos implica elevados costos de administración y operación, de ahí la escasa disponibilidad de fondos para inversiones de riesgo
A ello se agrega que a raíz de la crisis del 94-95 ganó terreno la cultura del “no pago”.
Asimismo, el 40 por ciento de la población rural reside en municipios sin acceso a sucursales bancarias
Y si bien el sector informal de crédito ofrece financiamiento a los productores rurales, este tipo de crédito es caro y de corto plazo.