Más pobres, más hambre
En el año 2000 en uno de esos encuentros donde se habla de pobres y buenos propósitos, en la Cumbre Mundial sobre la Alimentación y la Cumbre del Milenio, los gobiernos del mundo se propusieron reducir hacia el año 2015, al menos a la mitad los 843 millones de personas subnutridas que se contaron en el periodo 1990-92. Hoy, a más de la mitad de camino recorrido rumbo a la meta, el panorama luce desalentador y lejos de reducirse ha aumentado.
Sin embargo, paradójicamente el alza en los precios de los alimentos posibilita también la prosperidad agrícola; es decir, los hogares con tierras y los que obtienen ingresos de la producción y venta de alimentos básicos comercializados internacionalmente podrían beneficiarse de este hecho.
Así, las familias que dependen de la compra de alimentos para obtener la mayor parte de su comida podrían mejorar su capacidad de conseguirla o comenzar a producirla. Esto es, ver a la agricultura como un sector para consumo propio pero también como negocio rentable al poder venderlo a altos precios.
Empero, los exacerbados costos de los insumos, el escaso acceso al crédito, infraestructura y tecnología son las principales causas de la débil respuesta de los países en desarrollo.
Por esta razón, la FAO ha considerado necesario un enfoque global de doble componente para afrontar las repercusiones de estos precios, un enfoque que abarque medidas para permitir reaccionar al sector agrícola de los países en desarrollo, a la par de redes de seguridad y programas de protección social dirigidos a los más expuestos a la inestabilidad alimentaria.
Estas medidas no sólo resultan necesarias sino apremiantes pues se prevé que, para el año 2050, la demanda de alimentos se duplique y la urgencia de agua para el riego aumente hasta en un 50 por ciento; mientras que el cultivo de cereales deberá incrementarse al menos un 40 por ciento posibilitando la necesidad de 100 a 200 millones de hectáreas de tierra adicionales.
Así, las metas de la Cumbre del Milenio cada vez se ven más lejanas.