Altos costos de producción e importaciones dañan sector lecheroCostos de producción e importaciones dañan sector lechero
La crisis energética, los precios de granos, diesel, gasolina y medicinas, ocasionaron que desde hace tres años el costo de la leche que se paga al productor se mantuviera entre 4 y 4.50 pesos, expresó Federico del Valle Miranda, integrante de Integradora de Microlecheros Ixta-Popo.
En contraste el costo de los insumos ha aumentado en forma exponencial. Hace dos años la soya costaba 3.50 pesos y el año pasado llegó a estar en 8.25, es decir, aumentó hasta en un 200 por ciento, afirmó.
En la actualidad –preciso– el costo de la soya es de 8 pesos, aunque llegó a estar hasta 8.50 pesos. Es preocupante esta situación debido a que es un insumo importante en la elaboración de la dieta para los animales, ya que actúa como complemento proteínico.
El presidente del Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche, Álvaro González Muñoz, por su parte, consideró que el sector lechero nacional se encuentra en riesgo de desaparecer luego de que 100 mil productores están a punto de irse a la quiebra debido al aumento en el precio de los insumos, el bajo precio de venta y sobre todo a las importaciones desleales que este año ascenderán a 190 mil toneladas de leche en polvo.
Indicó que los pequeños y medianos productores de leche pierden diariamente 25 millones de pesos, debido al bajo precio, lo que es como un subsidio que involuntariamente conceden a la industria.
Los productores no observan el mínimo interés de autoridades federales o del Congreso, para participar en la solución de la problemática en cuanto al financiamiento, precios convenientes, recapitalización y comercialización de la ganadería lechera, mientras que “las secretarías de Agricultura y de Economía permanecen pasmadas ante la quiebra y desaparición de más de 100 mil pequeños productores”, expresó González Muñoz.
En el mercado internacional el precio de leche en polvo está más alto, respecto del precio que la industria paga a los productores nacionales. González Muñoz explicó que este año difícilmente podremos mantener un ritmo de producción en equilibrio, entre gastos a ingresos.
Todo el esfuerzo –agregó– que realiza el gobierno federal para apoyar la producción lechera, termina en manos de los industriales, que no quieren reconocer los verdaderos costos de inversión y producción, sin que exista una autoridad que regule este intercambio.
