La semana pasada una misión de empresarios japonés realizó un recorrido por la tierra del nopal, Milpa Alta, ubicada en el Distrito Federal, donde observaron plantaciones, el proceso de industrialización y de comercialización de la cactácea, además de degustar diversos platillos basados en este alimento.Margarita García de Alba del Bosque, presidenta del Consejo de Promoción de Nopal y Tuna (CPNT), explicó que en Japón hay una alga llamada wakame que se consume casi a diario, pero debido al tsunami que afectó a esa nación, se prevé desabasto, y como el nopal es físicamente igual a dicho alimento, empresarios de esa nación quieren un producto que lo sustituya.La nación asiática compra a México nopal en polvo, cambray, deshidratados sin moler, que se envía en bolsas de 20 kilos y allá se elaboran pastillas; pero además les interesan el concentrado de jugo de tuna y nopal. Se calcula que se exportan unas 50 toneladas de nopal procesado.En la misión comercial participó una empresa de jugos, otra de deshidratados, una de productos cocidos y un representante de una cadena de autoservicios, que tiene 18 tiendas que venden productos a la clase media-alta de Japón.Masahiro Fukui, empresario que integró la misión comercial, expuso que en Japón no se consumen cactáceas, pero si como dicen el nopal es muy bueno para diabetes y otras enfermedades, queremos promoverlo para que los japoneses acepten el producto.El nopal es reconocido como mexicanos y los japoneses quieren contenedores completos, en especial el nopal con baba, que consideran es de excelente calidad, apuntó García de Alba del BosqueAseguró que cuatro empresas mexicanas están listas para exportar y de la necesidad de formar clústers para tener los mismos estándares de calidad, empaques y poder atender la demanda. Llevamos cinco años trabajando y si nos aplicamos en otro quinquenio el nopal será un boom como el del aguacate. Además, tenemos que trabajar en comprobar que las propiedades del nopal son buenas para diabetes, colesterol y triglicéridos, recalcó.Expresó que luego del tsunami, Japón no disminuyó su interés por los productos mexicanos, que son muy valorados en esa nación, como la carne de cerdo o el aguacate, que tardo diez años en entrar a ese país, donde la exposición de productos mexicanos en Foodex ha contribuido a ello. No obstante, acotó, que el mercado japonés es muy exigente, pero es una puerta a otros mercados, por lo que hay que apostarle aunque el procesa dure de seis a diez meses para concretar una compra. Las empresas japonesas requieren muchos documentos, empaques, aspectos de inocuidad, análisis de pesticidas; México puede cumplirlos; ya lo ha hecho, subrayó.El CPNT planteó a la Secretaría de Economía establecer una fracción arancelaria específica para el nopal y la tuna, y la dependencia está en la mejor disposición de trabajar en ello. Para proteger la especie se solicito a la Sagarpa apoyo que la penca madre no se vaya a otros países, ya que México tiene más de 35 variedades de nopal registradas y aunque hay naciones que los han desarrollado, nuestro país es el principal productor y consumidor.El CPNT nació en 2006 a iniciativa de Aserca y hoy apoya 40 empresas en la promoción de sus productos, se apoyan en manejo de empaque diseño, revisar qué necesitan los clientes, estamos juntando la oferta y la demanda, finalizó García de Alba del Bosque.