AgronegociosMedio AmbientePolítica Agrícola

Agua que no has de beber…

Las tolvaneras del Norte, dicen, ya se apagaron. Lo más rudo de la sequía 2012, que, también decían era la más severa del último medio siglo y obligó a aumentar la importación de maíz a más de diez millones de toneladas (un tercio del consumo nacional); ya pasó. Aunque los calores no cesen en este “otoño-verano”, de cielos despejados con vientos chorreados, que no disuaden a los soles estacionales, que queman, pero no calientan las sombras, con esa intensidad.

La noticia es que “concluyó la sequía grave” y “las consecuencias de la sequía desaparecerán paulatinamente, por lo que la Conagua mantendrá las acciones para garantizar a la población que más lo necesita el agua para las actividades básicas”.

La explicación que se da, de esto, es que “hasta el 20 de octubre de 2012 ha llovido 99 por ciento de los 680.2 milímetros promedio del mismo periodo. Con ello, en las principales presas de México se alcanzó un almacenamiento de 58.8 por ciento, cifra 6 por ciento menor a la normal. En tanto, el llenado en la presas del Sistema Cutzamala es de 71 por ciento, lo que garantiza cumplir el abasto” (Sic… 24 de octubre).

Y luego siguen más argumentaciones, por el estilo, en breves líneas de comunicación, de la Comisión Nacional del Agua, que hablan de un invierno de escasos frentes fríos, pocas lluvias y calores inusuales, partiendo de comparaciones con las estadísticas históricas. Práctica recurrente, ésta de comparar, para hacer del discurso un recurso convincente que ilustre logros, aunque las cifras pequen ensimismas por verse forzadas a faltar a la realidad.

Los inviernos secos traen veranos secos y primaveras ardientes, alimentadas por incendios forestales. Para enfrentar una situación como ésta, se requiere de que las presas estén al cien por ciento de su capacidad útil, a fin de que se pueda evitar una crisis productiva, si es que esto es posible dadas las condiciones actuales en que se encuentra el campo mexicano; que ponga en riesgo el abasto nacional.

Dicen las versiones oficiales, a bien decir los comunicados de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Alimentación y Pesca (Sagarpa), que ese riesgo está descartado y que las cosechas están seguras.

Pero hay algo que hace que este rosario de declaraciones, números, estadísticas y afirmaciones no cuadre con el sentido común. La producción de alimentos depende del agua. No hay de otra. Pero, en el manejo de la información de este recurso, germina la confusión, como la mala hierba en los campos abandonados. Ya se dio una muestra de ello en líneas anteriores.

Y hay más afirmaciones de ese tipo:

“La meta sobre cobertura de agua potable establecida en el Plan Nacional de Desarrollo del Presidente Felipe Calderón, la logramos. Logramos pasar de 89.6 por ciento de cobertura en agua potable al inicio de la Administración, a 92 por ciento que fue la meta que se estableció. Esto permitió incorporar al servicio de agua entubada potable a 14.4 millones de habitantes y, por eso, alcanzar así, la meta del 92 por ciento, aún con un crecimiento de población por encima de lo que tenía estimado el propio INEGI.”(José Luis Luege Tamargo, director de Conagua, 9 de octubre).

Resulta que 89.6% de la población nacional equivale a cien millones 352 mil personas. 92% de la población es tanto como 103 millones 40 mil habitantes. La diferencia entre las dos cifras, en porcentaje es 2.4%, equivalente a dos millones 688 mil seres humanos ¿De dónde saldrían los 14.4 millones de mexicanos y mexicanas de los que habla el ingeniero Luege Tamargo?

A simple vista, hacen falta 11 millones 712 mil personas. Menos mal que lo más grave de la sequía ya pasó, y ese tipo de alucinaciones por deshidratación, ya se podrán desterrar. Sea por el bien del país.

Mostrar más

JUAN DANELL SÁNCHEZ

*Reportero mexicano especializado en temas agropecuarios, indígenas, de derechos humanos y desarrollo sostenible. jdanell@hotmail.com

Articulos Recientes

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Back to top button