Empoderamiento de burocracia interna de Sagarpa complica políticas para el campo
Anuncia titular de la dependencia, Enrique Martínez y Martínez, “cruzada contra la burocracia”.
El titular de la Sagarpa, Enrique Martínez y Martínez, reconoció que la burocracia interna de la dependencia que encabeza complica la operación de programas y políticas para el campo, por lo que ha emprendido una cruzada para hacer más eficiente el funcionamiento de la institución.
Al asistir al Foro Internacional de Desarrollo Rural y Seguridad Alimentaria, convocado por la Fundación Mexicana para el Desarrollo Rural (FMDR), con la representación del Presidente Enrique Peña Nieto, el funcionario federal recordó que en su paso por diferentes cargos públicos, incluido el de alcalde, gobernador y legislador, conoció “la tremenda burocracia” que hay en el país, pero “nada que ver con la enorme burocracia del gobierno federal y en particular de la Secretaría de Agricultura. Es terrible”, se sinceró.
En la Sagarpa –expuso– todo está dispuesto para no andar, las reglas de operación son de inhibición, los reglamentos, las leyes y la estructura programática está hecha para que haya subejercicios, además que se propicia el empoderamiento de una burocracia interna de tercera, que complica todo para que dependas de ellos.
Por eso dijo que trabaja en resolver esas debilidades y, de hecho, en el Congreso se ha aprobado ya la nueva estructura programática de la dependencia. “Estamos calando hondo en estas cuestiones que son estructurales, que son de fondo, y que a veces por complejas se prefiere soslayar, dejarlas ahí, pero siguen metiendo mucho ruido y siguen inhibiendo la producción de México”, remarcó.
En entrevista abundó en que hay que hacer todos una “cruzada contra la burocracia” para agilizar los procedimientos y para que los programas puedan llegar en tiempo a todos los productores.
Aclaró que esta cruzada no implica el despido de personal de la Secretaría, pero los burócratas tienen que trabajar, ser productivos, cambiar su mentalidad para ser servidores públicos, que cumplan a cabalidad esa vocación de servicio público, y que su mentalidad vaya cambiando, que se preparen más, y atender al productor y al ciudadano con toda eficacia.
Tampoco, dijo, se trata de quitar las reglas, porque también necesitamos normatividad que conduzcan los programas. Hay una cantidad enorme de reglamentación, hay que hacerla muy ágil, de manera tal que podamos hacer las inversiones en tiempo y forma.
En su intervención hizo énfasis en que el Presidente de la República ha dicho con toda claridad: “no he venido a administrar, he venido a transformar”. Aludió a las reformas estructurales que se impulsan en el país, donde en su momento vendrá la del campo.
Coincidió con el presidente del consejo directivo de la FMDR, Alberto Castelazo López, quien señaló que las políticas públicas no habían sido encaminadas a obtener la productividad del campo y se había pensado más en cómo dispersar recursos que dirigirlos a fomentar la producción en el medio rural.
Martínez y Martínez insistió en que el gobierno ha hecho muchas inversiones, canalizado miles de millones al sector y la productividad sigue estancada. Estuvo de acuerdo con los directivos de la FMDR, en hacer “tiros de precisión” para mejorar la productividad y se pronunció por no fomentar más el asistencialismo, por lo que estamos desapareciendo en la Sagarpa el término subsidio y los apoyos deben ser entregados a cambio de resultados productivos, añadió.
“Estoy totalmente convencido que los programas asistencialistas arraigan más la pobreza, inhiben la capacidad productiva que todos los seres humanos tienen”, subrayó.
Por otra parte, respecto a las implicaciones de la miscelánea fiscal para el sector agropecuario, Martínez y Martínez expresó que a nadie le gusta pagar más, pero había privilegios que era necesario eliminar y se tenía que buscar una generalización en el pago de impuestos para todas las actividades, en todos los sectores. No obstante, explicó, se conservaron algunos de ellos para que gradualmente vayan incorporándose a la normalidad.
“La opinión que he escuchado de los representantes, los líderes de los productores agrícolas y ganaderos, es en que se les atendió”.