En reforma del campo se requiere brindar certeza a propiedad de la tierra
El artículo 27 constitucional hoy no brinda certeza jurídica plena sobre la propiedad de la tierra: CNA.
El Consejo Nacional Agropecuario (CNA), organismo cúpula de sector agroempresarial mexicano, reiteró que es necesaria una nueva reforma agraria, dado que el artículo 27 constitucional en los términos actuales, no brinda certeza jurídica plena sobre la propiedad de la tierra.
El presidente del organismo, Benjamín Grayeb, refirió que dicho artículo señala “claramente que suelo y subsuelo son propiedad de la nación, entonces en cualquier momento que el gobierno quiera venir y disponer de tu terreno tiene la capacidad de hacerlo”.
Durante una reunión realizada con reporteros de la fuente agropecuaria, habló de la reforma del campo a la que ha convocado el gobierno federal y manifestó que lo deseable, en materia agraria, es que tengamos seguridad jurídica en la tenencia de la tierra.
Al referirse a la reforma energética y su relación con la tenencia de la tierra, Benjamín Grayeb explicó que en los términos actuales en que se encuentra el artículo 27 no puedes defenderte de nada, porque el gobierno puede requerir la propiedad e indemnizarte, con la diferencia
que ahora van a entrar manos privadas, tiene más aristas, por lo que estamos analizando el tema.
Lo que necesitan los agroempresarios del campo es que “te den la certeza de que tu tierra es tuya y nadie te la puede quitar”, remarcó
Como productor de aguacate en el estado de Michoacán, el empresario expresó que para él la producción de alimentos es más estratégica porque, “petróleo no podemos comer”.
La reforma energética es buena, matizó, porque permitirá al país contar con gas y fertilizantes más baratos, pero también existen propuestas para que la producción de alimentos sea considerada en la ley como estratégica o bien que el dueño pueda decidir qué hacer con su propiedad.
Pequeños productores deben ser prioridad
Benjamín Grayeb también consideró que la reforma del campo necesita incluir un programa específico para pequeños productores y regionalizar las políticas que se aplican en el norte, centro y sur del país.
Los apoyos –anotó– deberán otorgarse a los productores con base en la productividad, que exista un compromiso y resultados , y en esa medida seguir canalizando recursos, y que éstos no sean a fondo perdido.
Reconoció que la presente administración federal ya está trabajando en ajustar las políticas para el campo, por ejemplo, en las reglas de operación de los programas se ha avanzado, pero se necesita hacerlas más expéditas.
Insistió en que la reforma para el campo debe contemplar un fortalecimiento de la banca de desarrollo para que los créditos lleguen al productor a tasas más bajas; en que debe diseñarse un plan nacional de infraestructura, para la construccion de carreteras o sistemas de riego; invertir en investigación y extensionismo rural, entre otros rubros.
Grayeb señaló que la reforma para el campo no se dará en el corto plazo, ya que primero habrá consultas, mesas de trabajo y para septiembre-octubre se enviará al Congreso de la Unión para su discusión y posible aprobación.
