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Maíz transgénico a juicio

El Poder Judicial aceptó iniciar juicio de este cultivo, como lo demandan ambientalistas…

Luego de 21 meses de proceso legal, el Poder Judicial Federal aceptó iniciar el juicio en torno a la siembra de maíz transgénico en México, informaron integrantes de organizaciones que interpusieron la demanda colectiva contra la siembra de este cultivo.

En rueda de prensa, detallaron que han ganado 19 juicios de amparo, que incluyen 91 impugnaciones realizadas por la agroindustria y las secretarías de Agricultura y del Medio Ambiente.

Una vez que inicie el juicio no podrá realizarse la siembra de maíz transgénico en México, explicó el abogado René Sánchez Galindo, quien lleva la demanda colectiva, “porque se trata de una decisión de varias instancias y distintos órganos”.

Detalló que los tribunales deberán analizar si la siembra de maíz genéticamente modificado dañará el derecho colectivo de los mexicanos a la diversidad biológica, si la contaminación con transgenes vulnera el derecho de los pueblos originarios a utilizar maíces nativos, lo que incluye derechos derivados a la salud y a la alimentación.

Para la representante de la Colectividad, Adelita San Vicente, la sentencia final deberá considerar que la siembra comercial de maíces transgénicos dañará el derecho humano a la diversidad biológica y debe impedir la siembra en nuestro país.

En entrevista por separado, el director general de Syngenta México, Javier Valdés, señaló que frente a los amparos judiciales contra el maíz transgénico las empresas “estamos tratando de estructurar todos lo elementos para demostrar los beneficio de la tecnología y estamos esperando que se den las definiciones”.

Mientras tanto, añadió, seguimos invirtiendo en nuevos híbridos convencionales de maíz blanco y amarillo que brinden más beneficios y hagan más competitivos a los productores mexicanos.

Especificó que en híbridos la compañia trabaja con maíces para los estados de Jalisco, Guanajuato y Michoacán; se desarrollan tecnología de grano amarillo y blanco para Sinaloa, y para el sureste, Campeche, Chiapas, Oaxaca y Veracruz, se trabaja en dos híbridos de maíces blancos y uno de maíz amarillo.

Javier Valdés  expuso que la biotecnología es una herramienta más para que los agricultores puedan ser competitivos como en otros países, Brasil o Colombia, que ya la usan.

Oportunidad para maíces libres de transgenes

Adelita San Vicente comentó que ahora que la Organización Mundial de la Salud encontró que el glifosato, que se usa asociado con tecnología transgénica, puede ser carcinógeno, las autoridades de nuestro país deben suspender la siembra comercial de transgénicos.

Puntualizó que países como Rusia o China han cerrado su frontera a maíces transgénicos; incluso los chinos buscan en México maíces libres de trasgenes, lo cual representa una oportunidad para que nuestro país pueda exportar maíz blanco.

Al respecto, Emiliano Juárez del Grupo Vicente Guerrero de Tlaxcala afirmó que “los campesinos serían afectados al ser contaminados sus cultivos con transgenes y no tener la posibilidad de sembrar el maíz que ellos mismos le brindaron al mundo; también los grandes productores que verían cerrados los mercados interesados en maíz libre de transgénicos, demanda que cada día crece en el mercado mundial”.

Las organizaciones del Colectivo anotaron que es una falacia de los promoventes señalar que estas importaciones disminuirán con la siembra de transgénicos, se ha demostrado en los escasos países que siembran transgénicos (Estados Unidos, Canadá, Brasil, Argentina y la India suman el 90 por ciento de la superficie sembrada con transgénicos en el mundo) que los rendimientos no se incrementan, lo que sí aumenta es el uso de agroquímicos, señaló Cati Marielle del Grupo de Estudios Ambientales e integrante de la Campaña Sin maíz no hay país.

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De viva voz:

A estos 11 juicios de amparo que ganamos para que se admitiera nuestra demanda colectiva, se suman otros 11 juicios de amparo (9 que presentaron las corporaciones y 2 del gobierno federal), que combaten la medida precautoria. Juntos, los 22 juicios comprenden y representan las 91 impugnaciones intentadas por la agroindustria y las dependencias gubernamentales, así como las 26 impugnaciones que como colectividad promovente presentamos:René Sánchez Galindo

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