Recorte presupuestal pega fuerte al medio ambiente
Conafor con presupuesto menor en 63.6% y Conagua disminuye 36% en propuesta del Ejecutivo.
La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), como cabeza del sector, en su conjunto sufrió un recorte de 19 mil 791.6 millones de pesos (mdp), 35.5 por ciento menos que lo que tenía en 2016, de acuerdo con el Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible (CCMSS).
El organismo indica que los recursos para adaptación y mitigación al cambio climático,se redujeron en 44 por ciento, al pasar de 16 mil 631 mdp a 9 mil 247 mdp. Es en este rubro donde está la mayor parte de recursos para el medio ambiente y los bosques. Mientras que en el rubro de ‘servicios personales’ para la Semarnat hay un incremento del 6.7, en el de subsidios hay un recorte del 63.6 por ciento.
Todos las dependencias y programas –indica en un comunicado– dentro de la Semarnat sufrieron recortes.
En cuanto a organismos desconcentrados de la Semarnat, la Procuraduría General de Protección al Ambiente tuvo un ligero aumento cercano al dos por ciento, al igual que el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático, mientras que el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua aumentó en un seis por ciento. La Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas sufrió un “descalabro” de 25 por ciento, indica.
El CCMSS anota que notorio también el recorte en la Comisión Nacional del Agua (Conagua), organismo descentralizado, a quien se le redujo un “sorprendente” 36 por ciento.
En cuanto a programas, algunos permanecieron exactamente iguales, como el de Conservación y Aprovechamiento Sustentable de la Vida Silvestre, a cargo de la propia Semarnat, que se queda con 188.6 mdp, y el llamado PROCODES (Programa de Conservación para el Desarrollo Sostenible), a cargo de la Comisión Nacional de Áreas Naturales protegidas, que se mantiene sin recortes, con 234.9 mdp.
En la recientemente creada Agencia Nacional de Seguridad Industrial y Protección al Medio Ambiente del Sector Hidrocarburos, instancia creada ex profeso para atender los asuntos ambientales relacionados con la reforma energética sí hubo un incremento sustancial, del 25 por ciento (la misma proporción que se le redujo a la Conanp).
“Es poco claro para qué se requiere actualmente un incremento sustancial en para este rubro, cuando dicha Agencia Nacional está destinada a atender un tema que apenas está en etapa temprana de licitación (las famosas ‘rondas’) y cuando existe una Procuraduría Federal de Protección al Ambiente que con base a la LGEEPA debe realizar esas funciones”, señala el CCMSS.
Por otro lado, el recorte más drástico al presupuesto de los organismos descentralizados de la Semarnat, es el que sufre la Conafor, cuyo programa de subsidios para el desarrollo forestal sustentable fue recortado en 62 por ciento, al pasar de 5 mil 175 mdp que le fueron asignados en el 2016, a 2 mil mdp en el 2017.
El CCMSS considera que con los recortes previos y este nuevo recorte a la Conafor y particularmente a los recursos para el manejo forestal sustentable, se sufre un grave riesgo de que la Conafor fracase en el logro de sus objetivos y sus metas.
Argumenta que el incremento en la producción maderable ha sido del 12 por ciento en los últimos cuatro años, que si bien está por debajo de la meta original, es una buena noticia con el fuerte recorte al presupuesto, es difícil que se mantenga el incremento logrado y lo más probable es que ocurra un decremento si se considera el hecho de que desde hace un año ha mermado la capacidad operativa y se han cerrado las gerencias de la Conafor relacionadas con esas actividades (particularmente las Gerencias de Cadenas Productivas y la de Silvicultura Comunitaria).
“Este recorte significa tirar por la borda uno de los programas que efectivamente está rindiendo frutos en términos ambientales, sociales y económicos”, subraya.
¿Adiós a las metas del Acuerdo de París?
Otra de las metas –continúa– que se ve severamente amenazada con el recorte a los subsidios de la Conafor, es la de la contribución del sector forestal a la reducción de emisiones de gases de efecto de invernadero y al incremento de los acervos de carbono, como se establece en el Acuerdo de París, recientemente ratificado por el Senado mexicano.
Recalca que sin manejo forestal, sin desarrollo de emprendimientos forestales, sin inversión en el desarrollo de un modelo económico sustentable para el sector forestal, y con base sólo en subsidios del tipo de empleo temporal y servicios ambientales, la contribución de este sector será marginal y de corto plazo, y al no generar opciones productivas carece de un elemento central de la sustentabilidad, que es la viabilidad económica.
“La ENAREDD+ y toda la política de mitigación de gases de efecto de invernadero, bajo estas condiciones, sin apoyo al manejo forestal, está destinada al fracaso y en consecuencia será muy difícil cumplir con las contribuciones nacionalmente determinadas (NDC) y lograr el cumplimiento del Acuerdo de París”.
Para el organismos forestal “tal vez lo más preocupante de todos estos recortes es que se pone en evidencia el nivel de prioridad que tienen los bosques en la agenda del ejecutivo, cuando de los bosques no sólo dependen sus habitantes y los propios ecosistemas forestales, sino la infiltración de acuíferos, la conservación de los suelos y la biodiversidad, y el mantenimiento del clima, indispensables para toda la vida humana. Con esta situación es previsible además que aumente significativamente la vulnerabilidad ante fenómenos climáticos extremos. Paradójicamente en el proyecto de presupuesto desaparece por completo el Programa Nacional de Desastres”.
Finalmente apunta que “no son claros los motivos por los que el Ejecutivo castiga tan severamente a la Conafor, y sobre todo a su programa de subsidios para el Desarrollo Forestal Sustentable, pero el poder legislativo tiene en este momento la oportunidad de corregir esta situación, revisando los motivos que la justifican, si es que existen”.