Desarrollan biofertilizante con piedra pómez
En el Centro de Investigación en Ingeniería y Ciencias Aplicadas (Ciicap) de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) desarrollan un fertilizante, natural y sustentable, a partir de piedra pómez y otros materiales porosos de origen volcánico.
El doctor Said Robles Casolco quien encabeza dicho proyecto explicó que se propone aprovechar eficientemente los nutrientes en el campo y está orientado a la remediación de la seguridad alimentaria.
“He estudiando el comportamiento de los materiales porosos, entendí el comportamiento y la oportunidad que tienen estos para realizar un sistema de captación. No solamente de materiales orgánicos sino también de inorgánicos”, afirma el investigador.
Arreglos mecánicos
La iniciativa de este proyecto fue que en México existe un grave problema en la seguridad alimentaria y comenta que trabajó en conjunto con una empresa mexicana —propietaria de una mina de piedra pómez— ubicada en Perote, Veracruz.
Platicó que realizó un arreglo mecánico a la piedra para después hacerle la integración de material orgánico, encapsularlo y hacerlo un fertilizante para el campo. Este fertilizante es la mezcla de elementos biológicos como el potasio, manganeso y azufre, los cuales se emplean como sustrato para enriquecer la piedra pómez.
Una vez que este mineral absorbe los elementos, actúa como un fertilizante que alimenta la tierra de cultivo, liberando poco a poco los nutrientes que las plantas requieren durante su crecimiento.
“Se hizo una mezcla de componentes orgánicos para hacer la integración y una remediación en los cultivos básicos que existen en México, como lo es el maíz y el frijol. Trabajamos en parcelas demostrativas de maíz con este arreglo mecánico. Determinamos que para ciertas características, la mezcla orgánica cumple con los objetivos que hacen el crecimiento a partir del enraizamiento. Nos percatamos que el maíz tuvo una velocidad de crecimiento tan equitativo y capaz como los fertilizantes provenientes del extranjero”, explica.
Desarrollo para la agronomía
Informó que con el uso de la piedra pómez se puede incrementar de forma exponencial el crecimiento de un vegetal hasta en una semana, mientras que los fertilizantes tradicionales permiten que las semillas germinen hasta en 60 días.
Mencionó el investigador que con este proyecto los campesinos se verán beneficiados porque podrán obtener un producto que no daña el medio ambiente ni la cadena de evolución de cultivos, como el maíz. Además de asegurar que los alimentos son sanos una vez que llegan al consumidor. Resaltó que la receta de este abono consiste en utilizar minerales orgánicos con el objetivo de reducir la utilización de químicos, de esta manera los alimentos destinados para el consumo humano serán más saludables.
Robles Casolco definió que se pretende que las parcelas estén enriquecidas de tal forma que los cambios atmosféricos no perjudiquen la siembra, puesto que esta piedra modificada con nutrientes ayudará al organismo vegetal a crecer conforme su naturaleza sin resentir las alteraciones meteorológicas.
Construcción de planta
El nuevo fertilizante natural y sustentable fue financiado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) con un bono de transferencia del tipo B, actualmente en curso. El proyecto cuenta con dos patentes —una por el aporte mayoritario de origen orgánico y otra por el inorgánico—. Robles Casolco dijo que son dos solicitudes de patentes para un solo producto, se encuentran en el proceso de la obtención del título y en registro de la marca.
“Actualmente está en el proceso de la obtención del material y realizar las últimas evaluaciones del fertilizante. Por estrategia se instalará la planta en Perote, Veracruz, debido a que la materia prima se encuentra ahí y también por la cercanía con el suroeste de México, con el estado de Puebla y Tlaxcala; lugares donde se necesita fortalecer el cambio orgánico”, finalizó.
Fuente: Agencia Informativa Conacyt