Pega fructosa y edulcorantes artificiales al consumo de azúcar mexicana
En 2017 el consumo de azúcar por parte de la industria registró una caída fuerte y se ubicó en 300 mil toneladas, mientras que el de Jarabe de Maíz de Alta Fructosa (JMAF) ascendió a un millón y el de edulcorantes artificiales fue de 700 mil toneladas, puntualizó el director general de Sucroliq, Enrique Bojórquez.
El empresario alertó que en la industria de bebidas embotelladas se está haciendo una sustitución de azúcar por otros endulzantes y al desplazarla y tenerse que colocar en el mercado mundial a un precio más bajo hay un impacto para México de mil millones de dólares anuales.
Al participar en el 2º Congreso Internacional Zafranet 2018, Enrique Bojórquez, subrayó que “ya empieza la sustitución con edulcorantes artificiales y no se esta haciendo nada” y bajo esta tendencia “viene cayendo el consumo de azúcar y no sabemos si en 2019 desaparecerá totalmente el consumo de azúcar en la industria refresquera”.
Llamó la atención sobre el hecho que en la etiqueta de refrescos se usa el término “azúcares”, que es una “pequeña trampa”, porque se incluyen azúcar, fructosa, sucralosa y colorantes artificiales, que es una mezcla de edulcorantes. En el mundo, incluso, ya están mezclado azúcar con edulcorantes artificial.
Indicó que en antes de 1994 el consumo nacional de azúcar era de un millón 800 mil toneladas de azúcar en la industria refresquera, pero entre ese año y 2007 bajó a un millón y el de JMAF ascendió a un millón de toneladas.
El director de Sucroliq refirió que de acuerdo con datos oficiales en el período 2011-2017 el consumo de azúcar en México bajó en promedio anual 2.7 por ciento; mientras que para dicho periodo el de JMAF se incrementó 40 por ciento promedio al año.
Consideró absurdo que México tenga que salir al mercado mundial en una región deficitaria a buscar colocar sus excedentes que se generan a partir del ingreso de Jarabe de Maíz de Alta Fructosa (JMAF) y con este esquema los que mas pierden son los cañeros y los que más ganan son quienes más se benefician de la importación de ese edulcorante.
Pronosticó que a finales del 2018 las 100 mil toneladas de azúcar que estaban en cuota para repartirse entre todos los ingenios puede subir a 800 mil toneladas, las cuales se deben colocar en el mercado mundial.
Indicó que en el mercado nacional los precios se ubicaron en 838 dólares por tonelada, en tanto en Estados Unidos en 540 dólares y en el mercado mundial 270 dólares, por lo que sigue siendo atractivo exportar al vecino país.