Desde los años 70 el lobo gris mexicano se ha considerado como extinto, esta catalogado en la NOM 059 Semarnat 2010, como subespecie probablemente extinta en el medio silvestre. Sin embargo debido a los programas que el gobierno de México ha emprendido, en conjunto con la sociedad civil actualmente se encuentra en recuperación.
De acuerdo con la Semarnat el número de ejemplares en vida libre asciende a más de 44 individuos, por lo que la reproducción y liberación de estos ejemplares adquiere gran relevancia ecológica.
En septiembre de éste año la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) liberó una familia de 7 ejemplares en su hábitat natural. A los padres se les colocaron collares de telemetría satelital para monitorear su actividad y desplazamiento, y tener un adecuado seguimiento de la manada.
Este esfuerzo se realizó en coordinación con la Dirección General de Vida Silvestre, la Universidad Autónoma de Querétaro, la Asociación Civil Soluciones Ambientales ITZENI AC, la UMA Buenavista del Cobre, y ganaderos de la región.
A finales de los años setenta del siglo pasado, fueron capturados en nuestro país los últimos 7 ejemplares de esta especie en vida libre para dar inicio al programa de recuperación en cautiverio.
Durante casi 30 años de reproducción y gracias a la colaboración de varias instituciones zoológicas que se unieron al esfuerzo para su recuperación, se ha alcanzado finalmente la población necesaria para su reintroducción en vida libre.
Actualmente, el número de ejemplares en cautiverio de esta subespecie en México y Estados Unidos, es de alrededor de 300.
En 1998, el gobierno de los Estados Unidos de América inició su reintroducción en Arizona y Nuevo México. En nuestro país, el 11 de octubre de 2011, la Conanp en coordinación con el Grupo de Especialistas para la Recuperación del Lobo Mexicano, y con la aportación de Naturalia, A.C., llevó a cabo la primera reintroducción.
