Alto costo para agro imposición de arancel de EU a productos de México
El costo de la imposición de aranceles de los Estados Unidos a productos agroalimentarios de México sería de proporciones enormes si se considera que el año pasado las exportaciones de alimentos mexicanos sumaron alrededor de 35 mil millones de dólares (mdd), de las cuales 80% van al mercado norteamericano y que al mes de marzo, según cifras de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), el avance de éstas era de 9 mil 500 mdd.
La turbulencia que ha provocado el presidente estadounidense Donald Trump con el anunció de gravar a los productos mexicanos, en general, a partir del 10 junio con 5% y gradualmente llegar hasta 25%, ha generado la reacción del gobierno de México, que inmediatamente envío a Washington al secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, a buscar negociaciones con sus contraparte estadounidense para detener la medida.
El canciller anunció en su cuenta de twitter que a partir de mañana Víctor Manuel Villalobos Arámbula, titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) estará en territorio estadounidense para dialogar con su homólogo estadounidense Sony Perdue, dado que “las tarifas afectarían severamente a ese sector en EU”.
El titular de la Sader también informó en su cuenta de twitter que “por instrucción superior me incorporo a la comitiva que está negociando en #WDC las posibles salidas en favor de #México y del comercio de #Norteamérica ante la amenaza de imponer injustificadamente sanciones arancelarias a nuestros productos”.
Las exportaciones agroalimentarias mexicanas han mostrado un comportamiento positivo y se han consolidado en el mercado del vecino país del norte. De acuerdo con el Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA) a partir de la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) de 1994 a 2019 las exportaciones agroalimentarias nacionales aumentaron 734% al alcanzar 36.7 mil mdd.
La medida anunciada por Trump se da en un contexto donde se esperaba la confirmación del tratado comercial entre las tres naciones, ahora denominado T-MEC.
Cabe recordar que los productos mexicanos han enfrentado frecuentemente trabas o obstáculos al comercio como la reciente decisión del Departamento de Comercio de los Estados Unidos de no renovar el Acuerdo de suspensión que se tenía con horticultores mexicanos para colocar su tomate en tierra estadounidense. Y que sigue en proceso de negociación. Otro caso es el del azúcar cuyos volúmenes se han visto restringidos por el principal socio comercial de México en un “libre comercio”.
El dirigente de la Confederación Nacional de Productores Rurales, Eduardo Orihuela Estefan, expresó que en vísperas de confirmarse el tratado comercial entre las tres naciones, ahora denominado T-MEC, es motivo de preocupación e incertidumbre para los productores del campo mexicano el anuncio de la implantación de un impuesto del 5%a todo tipo de bienes y mercancías mexicanas con destino al mercado norteamericano, y más aún la advertencia de que esta imposición podría llegar hasta el 25 por ciento.
Orihuela Estefan expuso que “las decisiones súbitas y arbitrarias del mandatario Trump desequilibran los esfuerzos de planeación y ejecución de programas productivos, al mismo tiempo que trastocan inversiones que requieren tiempo para ser concertadas y puestas en práctica”.
“Los negocios y en particular los términos del Tratado de Libre Comercio de México, Estados Unidos y Canadá, no deben confundirse ni sujetarse a decisiones relacionadas con el proceso de migración centroamericana”, afirmó.
Diversos sectores del agro mexicano han externado su apoyo al Presidente Andrés Manuel López Obrador, respecto de la posición de México en torno de las relaciones comerciales y de migración anunciadas por el presidente de Estados Unidos Donald Trump.
La junta de coordinación política de la Cámara de Diputados emitió un pronunciamiento donde señala que “ante las recientes manifestaciones y acciones del Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, este órgano de gobierno expresa su más enérgico rechazo a cualquier estrategia de confrontación que tenga como objetivo imponer una agenda unilateral entre países vecinos y socios comerciales, perfilar una ruta para el aislamiento económico y utilizar la amenaza como mecanismo en las relaciones internacionales”.
Respaldo la posición del gobierno mexicanos de buscar “salvaguardar los intereses de México y privilegiar la ruta del diálogo y entendimiento responsable para lograr soluciones de fondo a los problemas que aquejan a ambos países.