Gobierno federal quiere arrancar producción de fertilizante en 2020
Con un monto global de 12 mil millones de pesos, incluidos en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2019, el gobierno federal pretende reactivar la producción de fertilizantes hacia el 2020, con lo que estima producir un millón de toneladas y reducir en 20% la importación de este insumo agrícola. La apuesta es, en una estrategia de largo plazo, llegar a la autosuficiencia en este rubro.
En entrevista con www.imagenagropecuaria.com, el responsable del Programa Nacional de Fertilizantes de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), Jorge Gage Francois, expuso que con la reactivación de la producción nacional de fertilizantes y bajo el esquema de compras consolidas de medianos y grandes productores, con la participación de Segalmex (Seguridad Alimentaria Mexicana) en la distribución, la intención es “contribuir a regular el mercado de precios y que los fertilizantes ya no estén tan caros, porque es un fenómeno que se ha tenido en los últimos años”.
Destacó que el Programa Nacional de Fertilizantes –cuyo piloto iniciará antes de mayo próximo en Guerrero— incluirá fertilizantes químicos y biofertilizantes, pero además contempla la entrega de semilla mejorada desarrollada en México, para lo cual se trabajó con el INIFAP Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias) y el CIMMYT (Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo), y hay un acuerdo con semilleros nacionales para este fin.
En la conversación con este medio, el funcionario federal destacó que la reactivación de las plantas, en el Complejo Petroquímico de Cosoleacaque y la planta Pajaritos para la producción de amoniaco –insumo para producir urea, que México importa principalmente de Ucrania–, está en proceso y los recursos del PEF se esta aplicando para mantenimientos mayores, resolver temas financieros, de inventario y de operatividad de la infraestructura.
Nos encontramos –agregó– con un escenario sumamente complejo en PEMEX Fertilizantes y se decidió ver cómo resolver el tema de producción. En el Golfo el gobierno recibió la planta de urea rehabilitada al 50% y en la parte de amoniaco se están realizando las inversiones presupuestadas para rehabilitar los trenes de producción. En el caso de fosfatos, en el Pacífico, la planta de Lázaro Cárdenas esta operativa y es la más grande de América Latina.
El gobierno –afirmó el funcionario de la Sader– decidió que las instalaciones que hoy están en Pemex Fertilizantes ahí se queden, mientras se resuelven los aspectos de mantenimiento, pero también todo el tema de corrupción que ha señalado el Presidente de la República, la forma tan irregular como se recibieron los activos, que incluso él anunció que se están previendo acciones legales.
Gage Francois aseguró que hace unas semanas platicó con el director de PEMEX fertilizantes, Rogelio Hernández, quien confirmó que estas inversiones que se realizan permitirían pensar que la producción de amoniaco se reactivaría hacia finales del presente año y en meses posteriores, una vez realizadas las pruebas de arranque y teniendo una producción continua de amoniaco –que se necesita para el proceso– podía empezar a obtenerse urea. Así en el primer trimestre de 2020 estaríamos produciéndola.
Recordó que la demanda nacional de fertilizantes es de 5 millones de toneladas y se tiene previsto que con los dos trenes de amoniaco que se están rehabilitando se producirán cerca de un millón de toneladas, con lo que estaríamos cubriendo el 20% de esta demanda.
A esto se agrega lo que se produce de fosfatos, por lo que en conjunto la aportación de las plantas sería arriba de la tercera parte de la demanda del país, con lo que se apoyaría la industria nacional del Estado, así como a los industriales mexicanas, que con el abasto de amoniaco podrán producir sulfatos y nitratos y que no dependan de importación como lo hacen en la actualidad.
El funcionario de la Sader reconoció que en seis años no se alcanzará a cubrir 100% de las necesidades del país y llegar a ser autosuficiente en este rubro, pero entre la recuperación de PEMEX Fertilizantes y la participación de industriales, sí hablaríamos de invertir la relación en la importación, que hoy es de entre 60 y 70%.
Jorge Gage explicó que para producir amoniaco se requiere gas, commodity que tiene precio de referencia internacional, y si deja de importarse amoniaco, con la producción nacional tendríamos un precio competitivo; donde tenemos ventaja es en la logística, dado que las plantas fueron pensadas para estar cerca de las zonas de producción agrícola, de tal manera que la ventaja es que si hoy importas fertilizante de Rusia el ahorro será en el flete.
Por ejemplo, expuso, traer una tonelada de urea de Ucrania cuesta 90 dólares por tonelada y sin importamos 2 millones de toneladas tendríamos un ahorro de 180 millones de dólares nada más por costos de logística.
El objetivo –subrayó– es bajar el precio de los fertilizantes a nivel interno, aunque matizó que “esta la libre competencia, pero la intención del Presidente de la República es que los abusos por condiciones de mercado no sigan y podamos contribuir a generar mejores precios”.
Biofertilizantes, otra opción
El funcionario de Sader también informó que el gobierno federal destinará alrededor de 100 millones de pesos para adquirir biofertilizantes para unas 400 mil hectáreas.
Al respecto aseguró que los fertilizantes químicos y los orgánicos son totalmente complementarios y así operan en la planta, por lo que dentro de los recursos que contamos vamos a hacer una adquisición importante de biofertilizantes, los cuales también se aplicarán en programa piloto de Guerrero.
Destacó que la apuesta del gobierno federal en dicha entidad –donde se estima apoyar con fertilizantes químicos y biofertilizantes a 310 mil productores de 81 municipios–, no solo es dar subsidio sino aumentar productividad en cultivos como maíz frijol y arroz.
No solo es entregar el fertilizante, sino que vamos con una serie de acciones integrales y trasversales donde habrá extensionistas especializados, instituciones científicas, INIFAP o CIMMY, incorporadas al Programa de Fertilizantes, que también incluirá semilla.
Indicó que el promedio de cosecha en Guerrero es de 2.7 toneladas por hectárea y que la meta es aumentarla por lo menos 25%, con fertilizante y semilla para el ciclo primavera verano. Estamos iniciando con un piloto en Guerrero, con la idea que sea replicado en el resto del país.
El Programa Nacional de Fertilizantes es uno de los 25 proyectos estratégicos de la presente administración. De las plantas de fertilizantes que adquirió el gobierno federal hay fotografías donde en unas calderas habían crecido un árbol de 15 metros, refirió Gage Francois, quien agrega que esa parte, en lo que corresponde a urea, ya se ha ido rehabilitando, es lo que entregó la administración pasada, no se ha podido probar porque se requiere gas para que pueda funcionar.
Pemex Fertilizantes esta haciendo un gran esfuerzo para tener gas y echarlas a andar en próximos meses…No levantamos el switch y mañana están los costales de urea o amoniaco”, expresó.