En México se producen más de 30 variedades de flor de nochebuena entre las que destacan los colores: rojo, amarillo, rosa, blanco, rayado y marmoleado. Sin embargo, la mayor parte de la producción y consumo de la flor es la roja con un 90 por ciento, después blanca o amarilla, y el resto rosa, rosada o marmoleada.
La nochebuena es una flor de herencia prehispánica y actualmente es símbolo mundial de la Navidad. El nombre en náhuatl de esta flor de ornato es Cuetlaxóchitl, que significa “flor que se marchita” o “flor de cuero”, de acuerdo con la historia, en la época colonial, los españoles nombraron a la flor como “Nochebuena”, porque florece en diciembre, pero el trabajo de los productores comienza en mayo con la plantación de los esquejes, ya que el cultivo tarda en promedio ocho meses en desarrollarse.
En este año a pesar de la pandemia y las restricciones sanitarias causadas por el Covid-19 no se ha dejado de producir la flor, por lo que los hogares podrán ser decorados con esta típica flor navideña.
En la Ciudad de México, se sembraron tres millones 654 mil 653 plantas de esta flor de origen mexicano en una superficie de más de 30.9 hectáreas establecidas en las alcaldías de Xochimilco, Tláhuac, Tlalpan y Milpa Alta.
Cabe resaltar que, del total de 16 millones 268 mil plantas, Morelos participa con seis millones 549 mil 818 plantas; Puebla, dos millones 650 mil 506; Jalisco, un millón 707 mil 639; México, 858 mil 989; Michoacán, 829 mil 826, y Oaxaca, 17 mil 093.
