El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) estima que un tercio de todos los alimentos producidos se desperdicia o pierde cada año –alrededor de mil 300 millones de toneladas–. Aproximadamente 14% de los alimentos a nivel mundial (hasta el 40% en algunos mercados) se echan a perder antes de que lleguen a los minoristas como resultado de los problemas de logística y la falta de cadenas de frío sostenibles.
La producción de alimentos que luego serán desechados requiere un área de tierra más grande que la superficie de China e India juntas, y tres veces más agua que la que contiene el lago Leman, en Ginebra. El uso innecesario de estos recursos tiene enormes impactos negativos en los ecosistemas y la biodiversidad.
El PNUMA nombró al chef italiano Massimo Bottura como nuevo Embajador de Buena Voluntad con el fin de intensificar la lucha contra el desperdicio y la pérdida de alimentos.
Bottura es chef propietario del restaurante de tres estrellas Michelin Osteria Francescana, ubicado en Módena, y ha sido reconocido como emprendedor social por su compromiso con la lucha contra el desperdicio de alimentos y la marginación social, uno de los principales objetivos de Food for Soul.
Durante los confinamientos por la Covid-19 en Italia, su familia produjo un programa de cocina en línea llamado Kitchen Quarantine, que alentó a las personas a ver el potencial invisible en cada ingrediente.
Se espera que su nombramiento, en el primer Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos, contribuya a catalizar la acción para reducir el desperdicio de alimentos en un mundo donde más de 800 millones de personas pasan hambre cada año y el sistema alimentario ha llegado a ser uno de los grandes motores de las crisis del clima y la biodiversidad.
“Si podemos utilizar todos los ingredientes al máximo de su potencial, reduciremos la cantidad de desechos que estamos creando y compraremos de manera más eficiente. En mi papel de Embajador de Buena Voluntad del PNUMA, lucharé para enfrentar este problema, que es una vergüenza mundial”, dijo Bottura.
Para Bottura, todos debemos empezar a comprender de dónde viene nuestra comida, tomar acciones para preservar la memoria y las técnicas alimentarias que nos puedan ayudar a innovar de cara al futuro, y cuidarnos de no repetir prácticas y conductas de consumo que han provocado los desafíos actuales de nuestro sistema alimentario. De acuerdo con el chef, el acto de cocinar, así como el de alimentarse, debe convertirse en una elección ética y no sólo en una cuestión de gusto.
La pérdida y el desperdicio de alimentos genera 8% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero. Reducir las prácticas inadecuadas en este sector es una de las formas más efectivas a través de las cuales las personas, las empresas y los gobiernos pueden reducir su impacto climático.
“No hay cabida para la pérdida y el desperdicio de alimentos, especialmente cuando millones de personas en todo el mundo pasan hambre”, dijo Inger Andersen, directora ejecutiva del PNUMA.
“La pandemia es una llamada de atención que nos recuerda la urgente necesidad de transformar nuestra relación con la naturaleza y, en particular, repensar la forma en que producimos y consumimos alimentos. Estamos complacidos de que Massimo Bottura, que ya está marcando la diferencia a través de sus refettorios, una fuerzas con el PNUMA para ayudar a lograr un cambio real”, añadió Andersen.
La organización Food for Soul busca reducir el desperdicio de alimentos y el aislamiento social a través de comedores llamados refettorios que benefician a personas vulnerables. Desde Milán hasta Río de Janeiro, México y París, la organización ha evitado que más de 125 toneladas de alimentos imperfectos lleguen a los vertederos y ha transformado estos ingredientes en más de medio millón de comidas nutritivas.
Bottura quiere inspirar más acciones contra el desperdicio al mostrar el valor de los alimentos y su conexión con la cultura, las emociones y la innovación.
El Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos es un día para expandir nuestra comprensión sobre este flagelo y tomar medidas simples pero poderosas al cocinar, preparar y almacenar nuestras comidas.
Además de ayudar a países y empresas a medir y reducir el desperdicio de alimentos, y promover cambios de comportamiento en favor del consumo sostenible de alimentos, el PNUMA apoya a los agricultores y las comunidades rurales a través de iniciativas como el Centro Africano de Excelencia para la refrigeración sostenible y la cadena de frío, ubicado en Ruanda.
