Exportación de tomate a EU observa buen comportamiento
La reapertura de la industria restaurantera y hotelera en México y los Estados Unidos, además de los atractivos precios de exportación han propiciado una mayor siembra de tomate en territorio mexicano, incrementando el cultivo de las variedades cherry y grape, por lo que el pronóstico de exportación para el año comercial 2021/22 es de 1.8 millones de toneladas, representando, 2% más que el año anterior.
De acuerdo con un reporte del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA,por sus siglas en inglés) a través de su oficina del Foreign Agricultural Service (FAS) en México y su Red Mundial de Información Agrícola (GAIN), por sus siglas en inglés), este comportamiento se da junto con la renegociación del Acuerdo de Suspensión de tomate entre México y Estados Unidos.
Así, la producción de jitomate mexicano del año comercial 2022 (que USDA divide de octubre del 2021 a marzo del 2023) se estima que 3.3 millones de toneladas, consecuencia de las condiciones climáticas favorables. El aumento en los niveles de precipitación y las inversiones tecnológicas a los sistemas de riego permitirán incrementar un 2% la producción respecto a las cosechas del año previo.
“Si bien, la pandemia impactó en la producción de esta hortaliza, se espera que el siguiente ciclo comercial se reponga a expectativas de condiciones climáticas favorables. La apuesta en la inversión a los sistemas de producción de agricultura protegida ha obtenido buenos resultados, resaltando la importancia del financiamiento a nueva infraestructura e innovaciones”, subraya.
El 80% de la producción nacional es exportada al mercado estadounidense principalmente, puesto que los productores obtienen mayores ganancias.
El volumen restante se destina mercado nacional. El precio de la hortaliza se incrementó notablemente durante la pandemia, debido a las complicaciones en la cadena de suministro.
De acuerdo al reporte, para el año comercial 2021 (de octubre del 2020 a marzo del 2022) se estimó el área sembrada en 45,403 hectáreas, 2% más alta respecto a 2020, cifra atribuible a los efectos de la recuperación postpandemia y a la estabilidad del clima, con una mayor disposición de agua.
El USDA recordó que Sinaloa es el principal estado productor de tomate del país. Se estima una superficie sembrada de 12,661 has., con una producción de 568,130 ton., y un rendimiento de 49.82 ton/ha para el ciclo comercial 2021. Los tomates sinaloenses son cultivados en su mayoría en cielo abierto, pero también la agricultura protegida se ha integrado activamente a la producción. Estos abastecen la región central del mercado estadounidense durante el verano. San Luis Potosí, Michoacán, Zacatecas y Jalisco han incrementado su producción a cielo abierto y de agricultura protegida en años recientes, destinando su producto a la costa este del territorio estadounidense.
No obstante, acota el USDA, el panorama para el resto del país resulta incierto, ya que la presencia de sequías desde septiembre de 2020 en la mayor parte del territorio mexicano deja en duda los niveles de producción final.
En México, se ha incrementado la producción de tomate bajo sistemas de agricultura protegida como invernaderos, sombras y túneles, permitiendo sembrar y cosechar durante todo el año y proporcionando mayores niveles de rentabilidad en la producción y una alta calidad de cultivos, reduciendo la cantidad de agua y minimizando el uso de plaguicidas.
El principal destino de estas producciones es el mercado de exportación. Querétaro, Coahuila y Nuevo León, son los estados con mayor inversión en infraestructura de agricultura protegida.
En México, el consumo de tomate per cápita es de 16.8 kilos anuales. Para el año comercial 2021/22 el consumo se estima en 1.4 millones de toneladas.