La colaboración permitirá alcanzar la soberanía nacional en producción de medicamentos
El rector de la UNAM, Enrique Graue Wiechers, afirmó que sólo la colaboración y la suma de las distintas capacidades será lo que permita alcanzar la soberanía nacional en la producción de medicamentos, biofármacos, vacunas, reactivos y sueros.
Al participar, vía remota, como testigo de la firma de un convenio de colaboración entre la Secretaría de Salud federal, los Laboratorios de Biológicos y Reactivos de México (Birmex) y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), refirió que este acuerdo está encaminado a apuntalar la capacidad científica, tecnológica y de innovación para la fabricación de estos artículos.
Previamente, el secretario de Salud federal, Jorge Alcocer Varela, celebró el convenio el cual, dijo, representa la sinergia en favor de Birmex y “articula diferentes aristas que solas, no son tan eficientes”. Además, se manifestó porque el acuerdo ayude a recuperar la autosuficiencia en la producción de este tipo de insumos que el país tenía hace unas décadas.
Alcanzar la soberanía en la producción de estos insumos “es un sueño entrañable de todo el sector salud y de los mexicanos, y el convenio representa un paso firme para conseguirlo”, agregó Graue, al enlazarse a la ceremonia en que se signó el documento, y en la que estuvo presente el coordinador de la Investigación Científica en la UNAM, William Lee Alardín.
El rector también recordó que la Universidad trabaja junto con el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y otras instituciones en el desarrollo de la vacuna contra la COVID-19, llamada Patria.
En su oportunidad, la directora General del Conacyt, María Elena Álvarez-Buylla Roces, coincidió en que el convenio busca promover que el Estado recupere la soberanía en materia de salud, lo que está directamente relacionado con el desarrollo e impulso de la ciencia, la tecnología y la innovación nacionales.
México, agregó, necesita del talento de los científicos, estudiantes y becarios de sus sólidas universidades públicas: la UNAM, la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), el Instituto Politécnico Nacional (IPN) y del Cinvestav, así como de los centros Conacyt, universidades estatales e instituciones de salud pública como el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) en los que se desarrolla investigación robusta.
El director General de Birmex, Pedro Zenteno Santaella, detalló que el convenio busca consolidar la distribución y producción de sueros, biofármacos, vacunas y reactivos, que permitirán a nuestro país recuperar la soberanía nacional, garantizar el respeto al derecho humano a la salud y estar preparados para atender cualquier emergencia de salud.
Para ello se enfocarán los esfuerzos en virología, biotecnología molecular, inmunología, desarrollo de fármacos, bioquímica, genómica, proteómica, vacunología, epidemiología, entre otras áreas.