Para atenuar sequía estimularán lluvias en norte y noroeste de México
Para aminorar los efectos de la sequía, el gobierno de México inició un programa para estimular la lluvia en Sinaloa, Sonora y Chihuahua, por medio de moléculas de yoduro de plata en las nubes.
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), en coordinación con la Secretaría de la Defensa Nacional, iniciará este mes el Proyecto de Estimulación de lluvias en los estados referidos.
En un comunicado, la Sader señaló que el programa consiste en liberar moléculas de yoduro de plata en las nubes para precipitar la lluvia, y comenzará la última semana de junio en Sinaloa, fecha en la que se espera se presenten las condiciones de nubosidad apropiadas para el proyecto.
La Sader resaltó que Comisión Nacional de las Zonas Áridas (Conaza) delimitó un polígono de trabajo que comprende dos millones de hectáreas para cada uno de los estados donde habrá estimulación de lluvias y es el doble de tamaño respecto al millón de hectáreas que comprendió el proyecto piloto en Baja California.
El encargado del programa de la Sader, Alejandro Trueba Carranza, y la coordinación de la Conaza, iniciarán un trabajo que comprenderá alrededor de tres meses, en las tres entidades donde se espera operar alrededor de 20 a 25 vuelos que transportarán los reactivos para realizar la aspersión entre las nubes, a fin de aprovechar toda la temporada agrícola.
Sinaloa, primera entidad a iniciar
En el caso de Sinaloa, se trata de un polígono rectangular que abarca desde el sur de la entidad hasta una parte de Durango y fue diseñado estratégicamente donde se dan las mejores condiciones de nubosidad, a fin de obtener el máximo efecto de la precipitación que se pretende generar.
Los recursos presupuestales en esta etapa son ciento por ciento del orden federal y se contará con apoyo de la Fuerza Aérea Mexicana, a través de su base aérea número 10, con sede en Culiacán.
Con la estimulación de la lluvia se espera la recuperación de la humedad en el suelo, lo que permitirá el crecimiento de alimento para el ganado, la siembra de cultivos de temporal y se realizará un monitoreo de la entrada de agua a las presas. De igual forma operará el proyecto en Sonora y en Chihuahua.
El objetivo es mitigar la sequía en beneficio de las zonas de temporales, pastizales, maizales y cultivos tradicionales y de una forma colateral se esperan escurrimientos a las presas, con lo cual se beneficiará a un mayor número de productores de los tres estados involucrados.
La dependencia federal recordó que este proyecto piloto operó con éxito en Baja California durante febrero y marzo pasados, en una extensión de un millón 015 mil 221 hectáreas que comprenden el poblado de San Vicente y la zona agrícola de San Quintín. Esto benefició a 10 mil habitantes en la zona de influencia del perímetro y a tres mil ganaderos mediante las precipitaciones que impactan en los mantos acuíferos y abastecen de agua bordos, arroyos y represas.
Provocando la lluvia
La dependencia explicó que este método desarrollado con tecnología mexicana —amigable con el ambiente— replica las condiciones de la naturaleza con la aplicación de las leyes de la física del agua y la inyección de núcleos de condensación, detonantes de una reacción desencadenante en la nube.
Es decir,
al liberar las moléculas de yoduro de plata en la nube, su estructura molecular hace que se posen en ella los cristales de hielo, liberando energía desencadenante que empuja la fusión de otros cristales para formar una gota y miles más, con lo que inicia la precipitación.
La saderv destacó que la Fuerza Aérea Mexicana aportó al proyecto dos aviones King Air 350i, uno listo para operar en la Base Aérea militar de Culiacán, Sinaloa, mientras que el otro ya se encuentra en Chihuahua.