Cobertura ínfima de Precios de Garantía, revela ASF

Además de las anomalías por 8.6 mil millones de pesos (mdp) que deberá aclarar Segalmex (Seguridad Alimentaria Mexicana), las auditorías de 2020 a este organismo arrojan que el programa Precios de Garantía a Productos Alimentarios Básicos (PGPAB), considerado estratégico por el gobierno federal, apoyó a 106,126 productores de granos básicos, por lo que su cobertura respecto de la población potencial registrada en el SIAP, que es de 2.6 millones de pequeños y medianos productores de básicos, fue de apenas 3.8% para maíz; 1.4% para frijol; 21.7% para trigo y 34% para arroz.

De acuerdo con la Auditoría Superior de la Federación (ASF), en 2020 la cobertura del programa respecto del padrón de pequeños productores de maíz –de Segalmex– alcanzó 99.6%; 99.9% de los productores de frijol; 101% de los productores de arroz; 107% de los productores de trigo y 99.98% de los medianos productores de maíz. Sin embargo, estos porcentajes no muestran la cobertura real del programa, dado que la dependencia no cuantificó a la población potencial ni objetivo, acotaron los auditores.

El Informe de la Auditoría de Desempeño 328-DE detalla que Segalmex entregó 10 mil 252 mdp en subsidios en 2020; sin embargo, “los gastos operativos para otorgar precios de garantía significaron al Estado mexicano una tercera parte de los subsidios totales entregados”, es decir, absorbieron 3 mil 290 mdp, “superiores en 186.4% respecto de 2019, y representaron 31.1% de los recursos fiscales de la dependencia encargada de la seguridad alimentaria de los mexicanos.

Los auditores indican que en el caso de los productores de leche, no fue posible identificar la cobertura, debido a que Liconsa ejerció recursos del programa PGPAB en conjunto con los del Programa Adquisición de Leche Nacional y registró a los productores en el mismo listado.

Por ello, el grupo auditor de la ASF realizó una prueba supletoria de cobertura en relación con el número de productores de básicos registrados en el Sistema de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) donde halló los datos de cobertura arriba referidos.

De los 10 mil 252 mdp en subsidios que otorgó Segalmex, 124,454 apoyos se otorgaron a 106,126 productores de granos básicos, por un monto de 8 mil 806 mdp; y mil 445 mdp para la compra de leche a precio de garantía.

Además, según la ASF, del total de subsidios, 74,422 apoyos (59.8%) fueron para pequeños productores de maíz; 25,826 (20.8%) para medianos productores de maíz; 15,782 (12.7%) para productores de trigo panificable y cristalino; 6,147 (4.9%) para productores de frijol, y 2,277 (1.8%) para productores de arroz.

El documento también hizo referencia a que las reglas de operación del PGPAB no cumplieron con todos los criterios establecidos en el artículo 75 de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, en materia de subsidios, al no identificar con precisión a la población objetivo ni establecer criterios redistributivos que procuren la equidad entre regiones y entidades federativas, para la entrega de apoyos a medianos productores de maíz –en 2020 sólo se benefició a Sinaloa, Tamaulipas y Sonora– y no especificó cómo la operación del programa no afectará sustancialmente las finanzas de la nación.

Respecto a los mecanismos de evaluación, el documento anota que en 2020 Segalmex no dispuso de un programa para la adquisición y acopio de maíz y frijol; se identificaron diferencias en los registros de las existencias físicas y las documentadas en el caso del maíz y frijol acopiado; sólo se documentaron 271 actas de inventario de 538 centros logístico.

Segalmex atendió las necesidades de frijol y de maíz de Diconsa para la provisión de su red de abasto, por lo que le vendió 97.1% del maíz y 41.9% del frijol; el resto de los granos los vendió a particulares –15,420.4 toneladas, por un monto 62 millones 364 mil pesos. También se identificó que de 15 empresas a las cuales la dependencia vendió el frijol acopiado, dos adquirieron la tonelada de frijol a 13,100 pesos, por debajo del precio medio rural de 14,243 pesos, “lo que indica que, en 2020 no existió un criterio normativo para fijar el precio de comercialización…”

El dictamen de la ASF sintetiza que en 2020 Segalmex no concluyó la consolidación de su estructura corporativa, por lo que presentó debilidades en la gobernanza del organismo, lo cual afectó la operación del programa PGPAB. Reconoce que si bien, la dependencia buscó incentivar el ingreso de los pequeños y medianos productores agropecuarios para contribuir a mejorar su nivel de vida y aumentar la producción agropecuaria con el propósito de alentar la autosuficiencia alimentaria del país, se identificaron áreas de mejora.

El grupo auditor de la ASF considera que lo anterior, “abre la posibilidad de un conjunto de oportunidades para la consolidación del programa y para que éste pueda convertirse, tal como se diseñó, en un programa que incentive a pequeños productores a mantener su participación en el sector agroalimentario, de forma que ésta sea autosustentable y económicamente viable, y que esta actividad económica les permita mejorar su nivel de vida”.

La ASF considera indispensable que Segalmex fortalezca su gobernanza para conducir y gestionar actividades y procedimientos operativos; disponga de manuales, políticas y procedimientos para regular los procesos sustantivos de planeación de adquisiciones, acopio, distribución, almacenamiento y comercialización; fortalezca sus sistemas de control interno para disponer de la información clara, completa, verificable y consistente con sus bases de datos, con los registros contables internos, con los reportes de la Cuenta Pública y los Estados Financieros; ejerza los recursos del programa PGPAB eficientemente;

programe, registre y racionalice los gastos de operación, a fin de promover el uso eficiente de los recursos y que éstos sean administrados con base en los criterios de legalidad, eficiencia, economía, racionalidad, austeridad, transparencia y honradez.