Industria del vino mexicanos vive su mejor momento, expertos
La industria nacional del vino vive su mejor momento y los consumidores cada vez buscan más la bebida nacional, coinciden en señalar empresas vitivinícolas y expertos.
De acuerdo con el Consejo Mexicano Vitivinícola (CMV) cada año se destinan 35 mil 822 hectáreas a la cosecha de uva bajo cinco vocaciones: mesa, vino, jugo, brandy y uva pasa. A partir de este insumo se producen 64 millones de litros de vino en 14 estados productores, a través del trabajo de 400 bodegas.
El impacto de la industria del vino es importante en toda la cadena, ya que el sector agrícola, representa la segunda fuente de empleo más importante con 500 mil puestos de trabajo.
Por la calidad de la producción de uvas industriales que produce México contamos con una producción de vino mexicano que asciende a 4 millones de cajas anuales logrando posicionarse en el gusto de los consumidores ya que de 3 de cada 10 botellas de vino que se consumen en el país son de vino mexicano, refiere información de la Secretaría de Agricultura.
La producción del vino mexicano –resalta– está adquiriendo relevancia a nivel nacional e internacional, por su “sazón”, frescura, variedad y origen, lo que suma a la oferta de sabores, para engrandecer y diversificar la gastronómica mundial.
La semana pasada, en París, Francia, representantes de 48 países de la Asamblea General de la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV) reconocieron la calidad de 9 etiquetas de Vino Mexicano que fueron seleccionadas por el CMV para dar a conocer ante la comunidad internacional el programa científico del 43° Congreso Mundial de la Viña y del Vino que se realizará en Baja California del 31 de octubre al 4 de noviembre próximos.
El congreso busca incentivar el intercambio de ideas técnicas y científicas, la generación de negocios y de propuestas que impulsen el desarrollo de la industria bajo tres líneas de acción: cambio climático, sostenibilidad y mercado post Covid-19.
“Nuestro Vino Mexicano se encuentra en su mejor momento. Resultado de ello, la OIV otorgó a México la sede de este importante congreso que permitirá mostrar directamente al mundo la calidad de nuestras uvas y las buenas prácticas que realizamos en nuestros campos y bodegas. Estamos seguros de que, a través de este evento, los ojos del mundo seguirán volteando a ver con admiración a nuestros vinos y nuestro país”, declaró Hans Backhoff presidente del CMV.
Las etiquetas que se degustaron fueron: Casta tinta syrah 2017 de Casta de Vinos, Emilia 2021 de Puerta de Lobo, Lagrimas de San Vicente-Verdejo 2020 de Vinícola Regional Ensenada, Chardonnay 2019 de Lomita Lomita, Carrodilla tempranillo 2017 de La Carrodilla, Monte Xanic Merlot 2020 de Monte Xanic, Fügi Espumoso mexicano 2020 de Casa Vegil, Ocho Rosé 2020 de Bruma y Hacienda Florida de Hacienda Florida. En conjunto con las bodegas que presentaron estas etiquetas estuvieron presentes las casas vitivinícolas Domecq, Freixenet, Cuna de Tierra, Llano Colorado, Cava 57, Escuela, Escuela Vitivinícola del Altiplano y Santo Tomás.
El Congreso espera la participación de más de 1,500 académicos, científicos, agrónomos, ampeólogos, enólogos, viticultores, laboratoristas, sommeliers y expertos de todos los países productores de vino. Asimismo, enlistaron como confirmados a los especialistas: Dr. Gregory V. Jones (investigador en ciencias ambientales de la Universidad de Oregón), la Dra. Ana Luisa Iglesias (Agencia Europea de Medio Ambiente) y María Teresa Cavazos (Centro de Investigación Científica y Educación Superior de Ensenada).
Por su parte, Pau Roca, Director General de la OIV declaró: “Es una gran alegría poder encontrarnos nuevamente cara a cara y brindar una vez más después de estos dos largos años de pandemia. Es aún más especial volver a encontrarnos con la comunidad de México, un país que contribuye muy activamente en los avances técnicos y científicos del vino debido a su experiencia y cultura vitivinícola”.