Agricultores exigen a AMLO atender problemática de comercialización de granos

El Frente Nacional por el Rescate del Campo Mexicano, que conforman agricultores de maíz, trigo y sorgo de más de una veintena de estados del país, solicitaron al presidente Andrés Manuel López Obrador, atender de inmediato la situación de emergencia que enfrentan ante los bajos precios que compradores ofrecen por sus granos. Esto, añadieron, los está llevando a la quiebra, ante el riesgo de dejar de pagar sus créditos y no sembrar para el siguiente ciclo agrícola, lo que repercutirá en la producción nacional.

Afuera de Palacio Nacional, los representantes de productores de granos básicos, que llegaron de diversas entidades como Baja California, Sinaloa, Chihuahua, Sonora, Tamaulipas, Michoacán, Guerrero, Zacatecas, Tlaxcala y Puebla, exigieron al primer mandatario la canalización de recursos fiscales para compensar la caída del precio de sus cosechas y atender los problemas de comercialización y baja rentabilidad que hoy enfrentan.

Los representantes de los agricultores –quienes amagaron con escalar las protestas sino se atienden sus demandas– detallaron que para compensar la caída del precio de granos se requieren 8 mil millones de pesos (mdp) para el maíz de Sinaloa y 4 mil mdp en el caso del trigo del sur de Sonora.

Propusieron establecer un esquema de compensación que permita alcanzar el precio de 7 mil y 8 mil pesos por tonelada para maíz y trigo, respectivamente. En el caso del sorgo se requiere un apoyo para alcanzar un precio de 6 mil 500 pesos para el productor.

Indicaron que el problema se deriva de la “caída estrepitosa” de los precios internacionales de los granos, que aunado al alza de insumos del 35% ha anulado la rentabilidad de los productores, quienes tienen costos de producción arriba de lo que paga el mercado.

En lo que llamaron el Acuerdo de Cajeme, al que dio lectura el representante  de Ciudad Obregón, Sonora, Alberto Vizcarra Osuna, los agricultores recordaron que en esa entidad mantienen tomadas las instalaciones de la Secretaría de Agricultura, para reclamar la intervención del presidente de la República y que se proteja la producción nacional de trigo, maíz y sorgo ante la caída de precios y aumento de insumos.

En el Zócalo de la Ciudad de México, los labriegos demandaron que el gobierno federal disponga de una bolsa de recursos para compensar la caída de precios internacionales de los granos señalados, la cual permita “salvar la contingencia y evitar una onda de choque”.

Plantearon el establecimiento de una mesa de diálogo directamente con el presidente Andrés Manuel López Obrador, dado que las reuniones con los titulares de las secretarías de Agricultura y la de Gobernación, Víctor Villalobos Arámbula y Adán Augusto López, respectivamente, además de los gobernadores de los estados en cuestión, han sido infructuosas y no han dado una respuesta a sus demandas.

En su pronunciamiento expusieron que se requiere reinstalar instrumentos para lograr duplicar la producción de granos básicos, teniendo como eje una política de precios de garantía para todos los productores y una planificación orientada al fortalecimiento del mercado nacional, restablecer políticas de crédito, de acopio de producción de semillas, extensionismo e infraestructura hidráulica para disponer de mayor volumen de agua,

“A México le urge una redefinición absoluta en su política alimentaria y eso empieza por retomar las metas nacionales de producción de granos básicos que abandonamos desde que impusieron esquemas comerciales que definen nuestros precios en los mercados de apuestas de las bolsas especulativas como la de Chicago…”

Los agricultores advirtieron que si el gobierno se mantiene “sin ver ni oir” y no dimensiona las consecuencias de no acudir al rescate de los productores nacionales, “estaremos sufriendo una herida, cuyas repercusiones económicas, políticas y sociales tendrán un impacto de consecuencias impredecibles para todos los mexicanos”.

Los productores aclararon que no son disidentes de ningún gobierno, pero enfatizaron que en la región del noroeste tienen la responsabilidad de producir el 50% de la producción nacional de trigo y 30% de la de maíz.

Y advirtieron que si no son atendidos,

haremos crecer la unidad nacional de los productores y escalaremos en las acciones de resistencia civil pacífica para que todos los mexicanos cobren conciencia de que también son afectados por la situación extrema que estamos viviendo”.

Desaparecieron apoyos a comercialización

Los agricultores informaron que el trigo se pagó el año pasado entre 7.50 y 8 pesos por kilo, pero hoy está por debajo de 5 pesos; el maíz se pagó en 7 pesos y en la actualidad se quiere pagar a 5 pesos por kilo.

Con números en mente, el productor del valle de Mexicali, Baja California, Horacio Gómez Carranza, indicó que el costo de producción de este cereal es de 41 mil 468 pesos, mientras que el precio por tonelada es de 5 mil pesos, por lo que se requiere vender en 8 mil pesos para recuperar sus costos y esto aplica tanto para trigo panificable y cristalino.

Recordó que el año pasado en la Bolsa de Chicago el precio fue de 10 mil pesos por tonelada y el comprador pagó al productor en 7 mil 500 pesos; por lo que consideró injusto que ahora quieran pagar basándose en la misma Bolsa, donde se cotiza entre 4 mil y 5 mil pesos.

Los productores estamos en una fuerte incertidumbre, por lo que urge que se establezca un programa emergente o se destinen apoyos emergentes para granos básicos, porque con los precios actuales no se tendrán los recursos necesarios para recuperar las inversiones realizadas en el campo, anotó Mario Pablo Domínguez, productor de trigo de Sonora.

De continuar así, alertó, habrá un impacto negativo en las familias que dependen del campo, golpeando la seguridad y soberanía alimentaria que el gobierno de México esta obligando a brindar a los mexicanos.

En tanto, el presidente de Campesinos Unidos de Sinaloa, Baltazar Valdéz, apuntó que la comercialización de 6 millones de toneladas de maíz de Sinaloa, está en una situación de crisis por la caída del 30% de los precios en el mercado internacional, ligado a los tratados de libre comercio, principalmente con Estados Unidos y Canadá.

El gobierno federal a través de Segalmex –y el gobierno del estado– ha anunciado la compra de dos millones de toneladas de maíz a un precio de 6 mil 965 pesos por tonelada, pero las otras cuatro millones de toneladas deben entrar a este esquema y pagarse al mismo precio, recalcó.

El representante de la Asociación de Organismos Agrícolas del Sur de Sonora, Álvaro Bours Cabrera –que representa a mil 500 productores, que siembran 80 mil hectáreas y producen 450 mil toneladas– indicó que han desaparecido los apoyos a la comercialización agropecuaria, dado que la extinta Aserca contaba con un presupuesto de 9 mil millones de pesos y cubría los 22 millones de toneladas de granos básicos del país.

El productor de sorgo en Tamaulipas, Rogelio García, que representa a 18 mil 500 del norte de la entidad, consideró que es importante poner atención a todos los granos básicos, se ocupa un programa emergente de comercialización para siguiente ciclo agrícola, que debe estar listo a más tardar en septiembre para que sea analizado por los diputados y se otorguen recursos presupuestales para dar certidumbre a las cosechas.

Los manifestantes fueron recibidos por representantes de la Dirección general de Atención Ciudadana del Gobierno Federal y en los próximos días tendrán una reunión, previamente agendada, con el titular de la Sader, Víctor Villalobos., según informaron.