Ajolote mexicano excelente fuente para estudiar metamorfosis y regeneración de especies
El ajolote es capaz de regenerar todas las extremidades: las branquias, la retina, regiones del corazón, regiones del cerebro; es el vertebrado modelo de estudio con mayor capacidad de regeneración celular y “las especies mexicanas son una excelente fuente para hacer investigación en términos de conservación, metamorfosis y regeneración”.
Así lo señaló el profesor-investigador del Laboratorio de Complejidad Molecular y del Desarrollo en el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional (IPN), unidad de Genómica Avanzada-Langebio, Luis Alfredo Cruz Ramírez, quien resaltó que 16 de las 32 especies del género Ambystoma son endémicas de México.
Durante la sesión Metamorfosis, regeneración y biología celular, organizada por el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt), el experto expuso que contrario a lo que se malinforma, las investigaciones de estas especies no agudizan la situación de peligro de extinción en que se encuentran; “es gracias a las investigaciones que se han mantenido estos organismos ex situ en laboratorios de todo el mundo”.
Los ajolotes que se usan para investigación en el mundo, detalló, no corresponden a la especie endémica Ambystoma mexicanum, sino un híbrido criado ex situ con todos los permisos y con los que es posible avanzar en el desarrollo de proyectos de conservación y rescate.
“Recientemente se ha desarrollado una axoarca, un ajolotario especializado en la reproducción ex situ, donde se hacen análisis de la variabilidad genética y detección molecular de patógenos, muy importantes para su reinserción en el hábitat”, expresó Cruz Ramírez.
La meta es la reproducción ex situ de mil ejemplares de cada una de estas especies, de las de mayor peligro de extinción Ambystoma mexicanum y Ambystoma dumerilii.”
Respecto al análisis de la metamorfosis, precisó que no todas las especies experimentan este proceso orgánico, y detalló criterios y características para desarrollarlo. Ejemplificó con la especie Ambystoma velasci, que puede hacerlo de manera facultativa bajo condiciones climáticas y de maduración sexual específicas.
Puntualizó que se pueden observar las etapas de metamorfosis en este organismo. Cómo las branquias se retraen, se degrada el tejido de la cola, cambia la pigmentación. Pasan de una respiración de branquia y piel a una respiración por pulmones que requiere la maduración de los pulmones y del corazón.”
Comentó que este fenómeno no ha sido suficientemente observado, por lo que actualmente se estudia más a profundidad con tecnologías aplicadas. “Con la transcriptómica se tomaron muestras de tejidos, branquias y corazón a lo largo de la metamorfosis para ver qué genes cambiaban; en etapas específicas hay genes que se encienden: primero para la degradación de los tejidos, pero también para que maduren pulmones y corazón, que pasa de ser de bicameral a tricameral”.
Destacó que la unidad de Genómica Avanzada-Langebio participó en la publicación de la secuenciación del genoma del ajolote en 2018 y en los estudios de la transcriptómica del ajolote silvestre, que permitió “desentrañar procesos y fenómenos a nivel molecular; es decir, ver cómo ocurren los mecanismos y por qué es capaz de regenerarse este organismo”.
El también doctor en Ciencias Químico-Biológicas por la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del Instituto Politécnico Nacional (IPN), explicó los secretos de la regeneración del ajolote. “Es un proceso extremadamente complejo y está dividido en muchas etapas”.
La conferencia “Metamorfosis, regeneración y biología celular” puede consultarse en el siguiente enlace: https://bit.ly/3Ld9o09.
Fuente: Conacyt