Ofrecen organizaciones campesinas promover y defender voto por Claudia Sheinbaum en todo el país
Al conmemorar, este 10 de abril, el 105 aniversario del asesinato del general Emiliano Zapata Salazar, en Chinameca, Ayala, Morelos, la candidata a la presidencia por la coalición Sigamos Haciendo Historia, Claudia Sheinbaum Pardo, y organizaciones campesinas, indígenas y afromexicanas, firmaron el Acuerdo nacional para una república rural justa y soberana, donde éstas se comprometieron a apoyar “la promoción y defensa del voto” a favor de la primera en los 30 mil ejidos y comunidades y 2 mil municipios de todo el país.
En el documento entregado a la aspirante presidencial, Rescate del Campo y la Soberanía Alimentaria. Segundo Piso de la Cuarta Transformación 2024-2030, 24 organizaciones se comprometieron a difundir la plataforma política electoral “100 pasos para la transformación compromisos de la doctora Claudia Sheinbaum Pardo” y el Acuerdo referido, además de “defender las conquistas del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador… frente al guerra sucia y el injerencismo extranjero de los conservadores neoliberales neoporfiristas del PRI-PAN-PRD”.
El apoyo en torno a las elecciones del próximo 2 de junio se haría extensivo a las candidaturas a gobernadores, diputados, senadores, diputaciones locales y presidencias municipales de dicha coalición, con el objetivo de “obtener la mayoría calificada en la Cámara de Diputados y en el Senado de la República para hacer posible la aprobación de las iniciativas de reformas constitucionales enviadas a los legisladores por el presidente Andrés Manuel López Obrador el pasado 5 de febrero, así como la Iniciativa de reformas al artículo 27 Constitucional”.
El Acuerdo nacional para una república rural justa y soberana proyecta que el “segundo piso de la transformación” será conducido por Claudia Sheinbaum en el período 2024-2030, y las organizaciones se adhieren a los compromisos hechos por ésta en 100 pasos para la transformación, en relación con los derechos de las mujeres; pueblos indígenas y afromexicanos; desarrollo regional e infraestructura; Plan Campeche y Plan General Lázaro Cárdenas del Río para el Desarrollo Regional Integral del Balsas y Pacífico Sur; medio ambiente, agua y recursos naturales; educación, ciencia, cultura; diversidad y patrimonio cultural; y erradicación de la pobreza extrema.
El documento signado contiene once puntos y uno de ellos habla de la necesidad de “impulsar la producción nacional para avanzar a mayores niveles de autosuficiencia en los principales alimentos de la población, empleando tecnologías que aseguren la salud y la nutrición” y señala que se “mantendrá la prohibición de siembra de maíz transgénico en el territorio nacional. ¡Sin Maíz No Hay País!”
Plantea que se impulsará en forma conjunta las iniciativas de reformas constitucionales presentadas por el presidente Andrés Manuel López Obrador el pasado 5 de febrero, en particular las reformas en materia de derechos de los pueblos indígenas; la de apoyos a pequeños productores y la referente a
“prohibir la siembra de maíz transgénico en México e impulsar la agroecología”.
En este sentido, hace hincapié en que se continuarán los programas enfocados al campo, como Sembrando Vida, Producción para el Bienestar, Precios de Garantía, Fertilizantes para el Bienestar y Bienpesca, “con los perfeccionamientos que permitan profundizar sus efectos transformadores de la vida rural, de la producción campesina, de transición agroecológica y de erradicación de la extrema pobreza”.
Propone “un Plan Hídrico Nacional que garantice el Derecho Humano al Agua, incluyendo: una reforma de la Ley de Aguas Nacionales para recuperar la rectoría del Estado sobre este recurso indispensable para la vida y para el desarrollo sostenible, así como para fortalecer la gobernanza del acceso justo y equitativo al agua y el uso de la misma; una política de tecnificación del riego; programas de restauración y conservación del suelo y de las cuencas; y el reciclado de aguas residuales debidamente tratadas para aprovecharlas para el riego agrícola”.
El acuerdo firmado entre Claudia Sheinbaum y las organizaciones también puntualiza que “se impulsará el ejercicio pleno de los derechos de las mujeres campesinas, garantizando su acceso a la titularidad de derechos agrarios y ampliando su participación en los programas de desarrollo” y de garantizar el acceso de los jornaleros agrícolas a derechos sociales, salud, educación, vivienda, medio ambiente sano.
Respalda la estrategia de apoyo a la agricultura, ganadería, pesca y acuacultura de pequeña y mediana escala, basada en la articulación con enfoque regional y territorial de las políticas y programas referidos al agua, a la ampliación del financiamiento y del acceso los mercados con precios justos para los productores, de fortalecimiento de los bienes públicos del sector agroalimentario, infraestructura, y producción nacional de fertilizantes y semillas.
Remarca, “valoramos y daremos apoyo a las políticas y programas que impulsarán la transición agroecológica, la sostenibilidad ambiental y la mitigación y adaptación al cambio climático de la agricultura, la ganadería, la pesca y la acuacultura”.
El documento hace énfasis en promover el fortalecimiento de la propiedad social, que cubre la mitad del territorio nacional, con la modernización del Registro Agrario Nacional, Procuraduría Agraria y el Fideicomiso Fondo Nacional de Fomento Ejidal) y de solucio0nar los conflictos agrarios añejos y recientes “para asegurar la paz y la gobernabilidad en el campo”.
Igual reconoce que la Ley General de Alimentación Adecuada y Sostenible, recién promulgada, proporcionará al gobierno de Sheinbaum Pardo, “un nuevo marco institucional para continuar impulsando la transformación del sistema agroalimentario y nutricional del país, avanzando en garantizar el derecho humano a la alimentación. Se pondrá en marcha el Sistema Intersecretarial Nacional de Salud, Alimentación, Medio Ambiente y Competitividad, establecido en dicha ley”.
