Crisis oceánica, amenaza a las comunidades en todo el mundo

El cambio climático acidifica y calienta el océano, acabando con la vida marina y acelerando la subida del nivel del mar, lo que amenaza a comunidades enteras en todo el mundo, recordó el secretario general de la ONU, António Guterres.
En conferencia de prensa en el marco de la Tercera Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos (UNOC3), Guterres advirtió que el futuro del océano -y con él el de la humanidad-, se acerca un punto de inflexión, “más allá del cual la recuperación podría volverse imposible”.
“Y seamos claros: son los intereses poderosos los que nos están llevando al límite. Nos enfrentamos a una dura batalla contra un enemigo claro que se llama avaricia”, sentenció.
La avaricia siembra dudas, niega la ciencia, distorsiona la verdad, premia la corrupción y destruye la vida por lucro, abundó.
Las prioridades
Para salvar los océanos y con ellos el planeta, Guterres delineó varias prioridades:
- Transformar la forma en que aprovechamos los recursos del océano
- Afrontar la plaga de la contaminación por plásticos
- Extender al mar la lucha contra el cambio climático
- Implementar el reciente Acuerdo sobre la Biodiversidad Marina de las Zonas Fuera de la Jurisdicción Nacional
- Actuar de manera colectiva, responsable y cautelosa en cuanto a la minería marina para no permitir que la explotación de los fondos del mar “se conviertan en el salvaje Oeste”
La salud de los océanos está ligada a la salud humana
Guterres enfatizó el sentido de urgencia de actuar, afirmando que la salud de los océanos es inseparable de la salud humana, la estabilidad climática y la prosperidad mundial.
Esas acciones, dijo, deben incluir estrategias basadas en el océano, como la protección de los manglares, las praderas marinas y los arrecifes de coral.
Además, “debemos aumentar el apoyo financiero y tecnológico a los países en desarrollo para que puedan protegerse de las condiciones climáticas extremas y responder ante los desastres”, recalcó, insistiendo en que la supervivencia de las comunidades costeras y de los pequeños Estados insulares en desarrollo depende de ello.