Alimentos absorben 57% del alza general de precios en México en último trimestre: FAO
El precio de los alimentos fue el principales responsables del aumento en la inflación general de México durante el último trimestre, al absorber 57 por ciento del alza general de precios, donde el huevo aumentó 38 por ciento, seguido de la carne, 25 por ciento, las frutas y hortalizas, 17 por ciento y el grupo de pan tortillas y cereales, 11 por ciento, informó la Representación de la FAO en México.
México ha sido de los países más afectados por las presiones al alza en los precios de los alimentos, sólo por debajo de Uruguay y Brasil, y en el nivel general de precios por abajo de Venezuela, Argentina, Haití y Uruguay, puntualizó el organismo en su Boletín trimestral, correspondiente a los meses de julio-septiembre.
El organismo indicó que en el periodo de referencia los aumentos han sido aún más acelerados, dado que la tasa anualizada de los últimos tres meses ha alcanzado 8.7 por ciento en julio, 9 por ciento en agosto y 10.7 por ciento en septiembre.
La FAO advirtió que el incremento en el precio de los alimentos ha sido un factor significativo en el aumento de la inflación anualizada nacional, de 3.4 en abril a 4.8 por ciento en septiembre, “lo que ha significado rebasar el límite previsto en el marco de la política macroeconómica”.
En su análisis hace la referencia de que de agosto de 2006 al mismo mes de 2012, el país tuvo una inflación anual promedio de 4.4 por ciento y el alza promedio en los precios de los alimentos fue de 6.8 por ciento anual.
En México, expuso el organismo internacional, los precios de los alimentos han mantenido una tendencia al alza durante los dos últimos años. En septiembre de 2010 la inflación en alimentos anualizada era de sólo de 1.2 por ciento; para abril de 2011 ésta se elevó a más de 4 por ciento; y después de diciembre 2011, ha sido superior al 6 por ciento.
Durante los meses de junio y agosto la mayor parte de los países latinoamericanos presentó alzas en los precios de los alimentos superiores al del índice general; sin embargo, en la mayor parte de éstos la inflación alimentaria se está reduciendo en meses recientes, con excepción de Brasil, Chile, México, Perú y Uruguay, donde ésta ha sido mayor al promedio de los seis años de crisis alimentaria, remarcó.
“El alza de los últimos meses en el índice general de precios al consumidor en México se explica, en gran medida, por el aumento en los precios de los alimentos. La incidencia de éstos en el índice general de inflación fue muy elevada en junio, se había reducido relativamente en julio y agosto, pero en septiembre volvió a ser largamente la causa principal en el aumento en la inflación general”, subraya la FAO.
Impacta canastas urbana y rural
El huevo fue el producto de la canasta alimentaria, tanto urbana como rural, que experimentó el mayor aumento en su costo (26.7 por ciento). De hecho dos terceras partes del aumento en el costo total de la canasta se debieron a este producto junto con las verduras y el pollo.
Entre junio y septiembre el costo de la canasta alimentaria rural pasó de 782.89 pesos a 818.50 pesos. El incremento de 35.61 significó un aumento de 4.5 por ciento en el trimestre; es decir, una tasa anualizada de 19.5 por ciento.
El costo de la canasta alimentaria urbana subió de mil 101.45 pesos en junio a mil 144.81 pesos en septiembre. La diferencia de 43.36 pesos representó un incremento de 3.9 por ciento, es decir, una tasa anualizada de 16.7 por ciento.
La FAO explica en su boletín que el incremento en el precio del huevo, debido al brote de influenza aviar AH7N3, que obligó al sacrificio de 22.3 millones de gallinas ponedoras, un 10 por ciento de la parvada nacional, con lo que cayó la producción, lo cual tuvo un severo impacto en el flujo de oferta de este producto, el cual no tenía canales establecidos para complementar la producción nacional con importaciones.
A pesar de que se eliminaron los aranceles y se agilizaron los procesos para la realización de compras externas no fue posible evitar una importante escasez inicial, la que posteriormente fue paliada con la entrada de 14 mil toneladas de huevo importado, así como con los avances en el repoblamiento y la recuperación paulatina del ritmo de producción, aseveró.