Liconsa mantendrá para el 2016 las compras de leche a los productores en los volúmenes de este año, 800 millones de litros, ya que contará con recursos globales por 3 mil 455 millones de pesos para este rubro y para la adquisición de leche en polvo para sus programas sociales, con un incremento de 500 millones de pesos con respecto a lo ejercido al cierre de este 2015, cuando su presupuesto fue de 2 mil 995 millones de pesos, informó el vocal de la Comisión Ejecutiva Bovinos Leche, Salvador Álvarez Morán.
El también presidente del Gremio de Productores Lecheros de la República Mexicana y tesorero de la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas, reconoció, en el marco de la reunión mensual, de la Comisión Ejecutiva Bovinos Leche, la sensibilidad de los integrantes de la Comisión de Ganadería de la LXIII Legislatura de la Cámara de Diputados y de su presidente Oswaldo Cházaro Montalvo, ya que analizaron la problemática de este sector y determinaron la necesidad de fortalecer a Liconsa con los recursos necesarios para mantener la estabilidad de la compra del lácteo a los productores nacionales el próximo año.
En comunicado de prensa, señalaron que esta empresa adquirió 697.7 millones de litros de leche a los productores nacionales en 2013; el año pasado 778.5 millones de litros y al cierre de éste, se espera superar los 800 millones de litros y las perspectivas para el 2016 es mantener las mismas compras que este año.
El padrón de sus proveedores también aumentó, al pasar de 9 mil 575 a 11 mil 248 productores en los últimos dos años; además, cuenta con 42 centros de acopio a nivel nacional y 10 plantas procesadores de leche.
Actualmente el sector lechero mexicano se ha visto presionado por la apertura comercial y por otros fenómenos, que han puesto en dificultades a muchos pequeños productores para continuar con la actividad, ya que el margen de utilidad ha desaparecido.
Además, nuestro país continuará inmerso en un mercado global de la leche, en el que impera la volatilidad de los precios, como resultado de fenómenos climáticos y especulativos y seguirá perdiendo pequeños productores, por falta de rentabilidad, a pesar de la recomendación de la FAO, de evitar que desaparezcan este tipo de unidades de producción.
Aunado a todo lo anterior, el consumo per cápita de lácteos seguirá a la baja, en tanto no se implementen acciones que reviertan esta tendencia y que se incremente el poder adquisitivo de la población.
