Para los ganaderos mexicanos la devaluación del peso “no es una tragedia”

Crece exportación y baja importación de carne bovina por paridad cambiaria.
El desliz del peso frente al dólar, en este momento, “no es una tragedia” para el campo mexicano, que tiene vocación exportadora, y en especial para el sector ganadero que el año pasado logró un superávit de 800 millones de dólares (mdd), expresó el presidente de la Comisión de Ganadería de la Cámara de Diputados, Osvaldo Cházaro.
Señaló que esta comprobado que el movimiento cambiario no es un problema sólo de la económica de México, sino de la del mundo, dado que todas las monedas se han deslizado. “No debemos espantarnos”, expresó.
El legislador explicó que el campo tiene una condición, en general, exportadora, y por primera vez somos superavitarios en la balanza comercial agroalimentaria. Tan sólo el sector bovino exportó el año pasado un millón 200 mil cabezas de ganado, con un valor de mil 200 mdd.
Con esta cifra, explicó se logró un superávit en la balanza sectorial de 800 mdd, porque las importaciones están disminuyendo en forma sustancial, debido a que la carne de Estados Unidos, la más importada por México, tiene un alto costo.
Osvaldo Cházaro dijo que un tipo de cambio que este de acuerdo a los mercados, “en su justa dimensión”, en este momento incluso favorece al sector ganadero, pero matizó que esto no quiere decir que en el largo plazo, porque tenemos insumos que son importados.
Tras precisar que en 2015 la producción de carne en canal fue de 170 mil toneladas, el diputado indicó que el ganado en pie hace varios meses que ajustó su precio a la baja; sin embargo, lamentablemente, todavía no hemos visto reflejado eso en el consumidor.
En este sentido, consideró que los eslabones de la cadena, sobre todo los que están más cerca del consumidor, deben hacer un esfuerzo para que este alimento sea más accesible, “porque así venderíamos más”.
Agregó que el precio de la carne de res quizá se considera un poco elevado el precio, pero es el consumidor quien toma la decisión y tiene la alternativa de cerdo o pollo, pero en el caso de la res “hay que ser pacientes y esperar que el mercado agarre su nivel”, concluyó.