Blindar al campo de México contra cambios de gobierno, piden agroindustriales
En virtud de que el sector agroalimentario de México tiene un valor amplificado de hasta 25 por ciento del PIB nacional —según algunos analistas—, la máxima cúpula agroindustrial del campo mexicano planteó la necesidad de establecer una “Agenda blindada 2030” o transexenal para garantizar la continuidad y reforzar políticas públicas exitosas y de beneficios productivo en el sector, dentro del nuevo gobierno que emane de las elecciones del próximo 1 de julio.
Al presentar el Modelo de Política Pública Visión 2030, que es “una propuesta concreta del sector agroalimentario para los candidatos a la Presidencia de la República”, el Consejo Nacional Agropecuario (CNA), expuso que “muchas de las políticas públicas que se efectúan en un sexenio, pierden continuidad con el cambio de gobierno. Esto obstaculiza el éxito de políticas planeadas a mediano y largo plazo. Lo que deja programas, muchas veces exitosos en espera, sin recurso y finalmente desechados”.
En México –según analistas consultados por www.imagenagropecuaria.com– una constante ha sido que los gobierno electos diseñan políticas públicas y programas que no tienen continuidad con los cambios de gobierno –incluso si hay relevos de secretarios o funcionarios de Agricultura o de Economía–, por lo que tienden al fracaso. Otro problema es que los encargados de las áreas no conocen al sector, por lo que “desechan” al personal operativo, burocratizan sus despachos y terminan improvisando sin rumbo alguno y sin objetivos claros.
Por ello, el llamado reiterado del CNA, ahora en voz de Bosco de la Vega, a establecer una estrategia transexenal para fortalecer e impulsar el campo mexicano en los próximos 20 años, debe ser considerado por el próximo gobierno electo, señalan expertos.
Expresó que cada seis años se reiventa el país y cada año tenemos que negociar con Hacienda, por eso nos gustaría tener presupuestos multianuales para el agro nacional.
Al señalar que la reforma del campo quedó pendiente en la presente administración, subrayó que el sector agroalimentario mexicano debe ser considerado estratégico para el desarrollo del país, por lo que fortalecerlo en el mediano plazo será un tema de seguridad nacional, ya que puede ser un motor de desarrollo nacional.
El documento destaca que el sector agroalimentario mexicano representa en su conjunto 8.5% del PIB nacional –, según datos de 2016– sumando el 3.7% que aporta el sector primario y el 4.8% de la agroindustria. Sin embargo, diferentes organismos internacionales, indican que el PIB Agropecuario Amplificado puede llegar a representar alrededor del 25%.
Un aspecto a destacar dentro del documento es su énfasis en incrementar el presupuesto que se destina a la investigación y desarrollo, el cual debe igualarse al promedio de los países miembros de la OCDE, es decir, canalizar un 2.4% del PIB para este rubro. Para ello debe aumentar anualmente un 0.15% el presupuesto asignado para la investigación y desarrollo en los sectores agropecuario, forestal y acuícola.
Con dichos recursos se podría doblar el monto asignado al INIFAP y llegar a 2 mil 313.8 millones de pesos, esto permitiría aumentar el número de proyectos y patentes e implementarlos a nivel nacional.
El presidente del CNA planteó seis modelos estratégicos de solución viables y con impacto a mediano plazo para robustecer la política pública agroalimentaria nacional, que son: innovación e investigación; encadenamiento productivo.
Producción sustentable y cambio climático; comercialización; diversificación de mercados e inversión en bienes públicos y bienestar laboral.
El modelo propuesto por el organismo agroempresarial sugiere presupuestos multianuales que le den certidumbre al sector; un mayor acceso al financiamiento y a la innovación tecnológica; seguridad plena de la tenencia de la tierra; modernización de las instituciones y simplificación en las reglas de operación de los programas de apoyo, entre otros temas.
También plantea la construcción del primer Observatorio Agroalimentario y Forestal, con el objetivo de generar información y análisis para gobiernos, academia, sector privado y sociedad civil sobre el desarrollo del sector.
Hay presiones contra el TLCAN
En rueda de prensa Bosco de la Vega también comentó que si hubiera una intensión de Estados Unidos de “reventar” Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) ya lo hubiera hecho, aunque reconoció que hay presiones de que quieren cambiarnos por sector automotriz, pero reiteró que el sector agropecuario no será moneda de cambio, “no lo vamos a permitir”.
El CNA, junto con sus socios privados de EU y Canadá, están por establecer un trato justo para los tres países, incrementar el comercio y reglas claras en materia fitosanitaria.
Por otro lado, comento que de 22 millones de hectáreas cultivadas en México se puede pasar a 26 millones, con lo que se podría producir más alimentos, sustituir importaciones, y abatir pobreza en el campo, donde se da la mayor migración.
Recordó que FAO recomienda producir 75% del abasto interno y México hoy tiene 55%, y el primer objetivo es pasar al 65%. Reconoció que aun cuando se tiene una balanza superavitaria en exportaciones, hace falta fortalecer el abasto interno, porque
depender de la comida es el peor de los talones de Aquiles que se pueden tener”.
