Padrón de beneficiarios de Producción para el Bienestar tendrá plataforma digital pública
Tras informar que la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) no dejará de apoyar a los productores del norte del país, el subsecretario de Autosuficiencia Alimentaria de la dependencia, Víctor Suárez Carrera, adelantó que en un mes estará listo el padrón de beneficiarios del programa Producción para el Bienestar, que incluye hasta ahora un millón 400 mil productores, pero que estima sumará al término del año 2 millones 200 mil, mismo que estará disponible en una plataforma digital para consulta pública.
El funcionario federal expuso que el gobierno de la “Cuarta Transformación” tiene como obligación la trasparencia en el uso de los recursos públicos, que la sociedad conozca quién recibe cada pesos del subsidio público, estamos planteando que el padrón de productores de Producción para el Bienestar incluya todos los nombres de los beneficiarios, por localidad, superficie y monto de apoyo, y hacerlo del conocimiento público en una plataforma digital, informática, de acceso abierto, en tiempo real y que se pueda consultar en forma amigable.
Luego de participar en un foro con el tema de “Políticas de la Sader”, realizada en El Colegio de México (Colmex), el funcionario federal recordó que este tipo de plataforma ya se hizo con “subsidios al campo”, que realizó Fundar, Centro de Análisis e Investigación —a la que pidieron apoyo—, la Universidad de California y la Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras (Anec).
Cabe señalar que este padrón corresponde a lo que fuera en pasadas administraciones Proagro Productivo o Procampo y Programa de Apoyos para Productores de Maíz y Frijol (Pimaf), donde investigaciones periodísticas y organizaciones no gubernamentales detectaron actos de corrupción y que se beneficiaba también a funcionarios en turno, ex secretarios de Agricultura, gobernadores, ex gobernadores, políticos, narcotraficantes y sus familiares, e incluso se entregó a personas ya fallecidas —según la Auditoría Superior de la Federación.
Al ser cuestionado sobre la inconformidad que manifiestan los productores del norte por excluirlos de ciertos subsidios, Víctor Suárez aseguró que éstos seguirán siendo apoyados, dado que son fundamentales para la política agroalimentaria del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, pero bajo un principio de “justicia distributiva” si en el pasado se apoyo con 80% de subsidios públicos al 15% de los agricultores y grandes empresas, eso ya terminó y ahora será 70% de los subsidios para la agricultura pequeña y mediana y 30% a la comercial, en determinados programas.
Recalcó que con la nueva orientación de subsidios no quiere decir que a los productores del norte se les va a dejar de apoyar, pero se hará con ciertos límites, porque los grandes agricultores ya están más capitalizados y requieren otro tipo de asistencia, tienen apoyo en inversiones públicas para obras hidroagrícolas, sistemas de riego, construcción de canales; además la mayor parte de los créditos de la banca de desarrollo, seguros agrícolas, subsidios a tarifas eléctricas y diesel, apoyo para adquirir tractores y equipo se canaliza a la agricultura comercial.
Además, hay otros programas que tienen que apoyar a productores organizados económicamente para hacer proyectos de industrialización, encadenamientos productivos y en infraestructura de almacenamiento, por ejemplo, no puede haber apoyos que se den a individuos, hay un programa que conjuga subsidios con crédito, es el programa de infraestructura de granos que maneja la Agencia de Servicios a la Comercialización y Desarrollo de Mercados Agropecuarios (Aserca), con un crédito del Banco Mundial , donde este año hay 150 millones de pesos.
Al abundar sobre la forma en que se otorgan los apoyos de la Sader, Víctor Suárez manifestó que se trata de canalizar apoyos productivos en forma directa sin intermediarios a los pequeños y medianos productores, lo cual no excluye que haya otro tipo de programas que apoyen proyectos productivos de valor agregado, de diversificación productiva, industrialización o de infraestructura, pero la mayor parte de los programas del sexenios pasados estaban capturados por intereses privados, había un gran dispersión de programas y mucha captura de los recursos que no llegaban directamente a los productores, se quedaban en el camino y se utilizaban para fines clientelares, corporativos, políticos-electorales.
Ahora se trata que lleguen de la Tesorería a las cuentas bancarias de los productores y que ellos tengan derecho a decidir qué hacer con esos recursos para fines productivos y que no se les impongan un paquete determinado o un proveedor determinado, que muchas veces esto generaba procesos de corrupción.
Víctor Suárez subrayó que el potencial de los agricultores pobres es muy alto e incluso en las zonas más marginadas hay mucho por desarrollar nada más que se les ha abandonado, no les apoyó y en la etapa neoliberal se les estigmatizó como de pobres sin potencial.
