Flor de veinte pétalos
Los conquistadores españoles llamaron al cempasúchil “clavel de indias”. De color amarillo intenso, el tallo del cempasúchil puede llegar a medir hasta un metro de altura, mientras que sus botones pueden alcanzar los cinco centímetros de diámetro.
Famosa por su color amarillo y por su tradicional uso en las ofrendas de Día de Muertos, esta planta es un ícono de México en el mundo.
La “flor de veinte pétalos”, por sus raíces en lengua náhuatl cempoal-xochitl, veinte-flor. Sólo florece después de la época de lluvias y junto con las calaveritas de azúcar y el pan de muerto, es uno de los elementos importantes en estas fiestas celebradas en México durante los días 1 y 2 de noviembre de cada año, para ofrendas florales en sepulcros aun cuando también es ocupada para adornar en otras fechas.
Con los pétalos se marca en el piso el camino que habrán de seguir las almas delos muertos en su paso hacia los altares domésticos en su honor, según la tradición y creencia.
También, se desprenden las flores del tallo para unirlas en su parte media, con aguja e hilo, de una en una y hacer una sarta, y al sujetar los dos extremos se forma una cadena. Cuando ésta se cuelga al cuello significa: bienvenido o bienaventurado.
En los pueblos del estado de Guerrero son colocadas a candidatos a cargos de elección popular o a personas que celebran fechas importantes. Asimismo, puede cortarse la flor junto con su tallo y ponerse en recipientes con agua.
En algunos lugares elaboran con los pétalos del cempasúchil sopas y otros alimentos para el consumo humano. Asimismo, el cempasúchil, conocido en otros países como “Mary Gold”, también ha sido aprovechado para elaborar insecticidas y medicamentos (ya desde la época prehispánica era parte de la medicina tradicional).
El cempasúchitl cuenta también con una gran importancia económica. Debido a su alto contenido de carotenoides, cualidad aprovechada industrialmente en México y un sin número de países alrededor del mundo.
Lo anterior, para producir un ingrediente pigmentante que se utiliza en los alimentos para la avicultura, pues provoca el tono amarillo en la piel de los pollos y en la yema de los huevos.
México es el principal oferente en el mundo de productos elaborados a base de la flor de cempasúchil, los que cuentan con una importante demanda provocada por el crecimiento de la producción avícola. Así como por la sustitución de pigmentantes sintéticos por naturales, toda vez que el maíz que se utiliza para generar el mismo efecto está destinado exclusivamente al consumo humano en algunos países.
Fuente: Guía Verde de México