Urge prohibición “progresiva” de plaguicidas altamente peligrosos
Para la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) es urgente la aplicación del principio precautorio y la prohibición “progresiva” de los plaguicidas altamente peligrosos, además de definir y promover acciones en regiones que exigen la intervención inmediata de las autoridades federales con el fin de salvaguardar el bienestar de la población.
Asimismo, tomando en cuenta que la importación de plaguicidas al país para su distribución, venta, aplicación, fabricación, envasado y formulación está sujeta a control de la dependencia, en cumplimiento del principio precautorio se ha negado la importación de glifosato para prevenir los riesgos.
Esta a cargo de impulsar el fortalecimiento de los procesos agroecológicos en los sistemas de producción como una alternativa a la problemática del uso excesivo de los plaguicidas con el propósito de garantizar alimentos sanos a la población.
La publicación en el Diario Oficial de la Federación, el 6 de noviembre del año en curso del Decreto por el que se modifica la Ley de los Impuestos Generales de Importación y de Exportación, hará posible prohibir la importación de diversas sustancias tóxicas, evitando el uso de moléculas prohibidas, así como aquellos plaguicidas de alta peligrosidad cuyo registro sanitario ha sido cancelado.
La Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios se ha sumado a los trabajos conjuntos para la revisión de los fundamentos jurídicos que permiten mantener una vigencia indefinida, y con ello proponer modificaciones para establecer plazos de revisión y, en su caso, someter a cancelación los registros de plaguicidas, considerando los daños a la salud y al ambiente.
Los relatores especiales de Naciones Unidas han declarado que estar expuestos a sustancias tóxicas sin nuestro consentimiento constituye una violación flagrante a los derechos humanos.
Hoy en múltiples estudios científicos se ha reportado que los plaguicidas altamente peligrosos pueden causar la muerte por su alta toxicidad aguda, o provocar efectos crónicos a la salud. Desde la década de los sesenta del siglo pasado Rachel Louise Carson nos advirtió sobre el grave daño que ocasionan los plaguicidas a la salud y al ambiente.
El uso de los plaguicidas debe ser compatible con el equilibrio de los ecosistemas a fin de prevenir los daños que pudieran ocasionar con el objeto de garantizar a las personas su derecho a un medio ambiente adecuado para su desarrollo y bienestar, siendo un tema de atención urgente que ya actualmente algunos informes reportan que en México existen 140 ingredientes activos de plaguicidas autorizados que están prohibidos en otros países y de 183 ingredientes activos de plaguicidas clasificados como altamente peligrosos y que están incluidos en convenios ambientales internacionales.