Superbacterias en animales de granja una “bomba de tiempo” para la salud pública

Las superbacterias se están generando en las granjas como resultado del uso excesivo de antibióticos y los organismos resistentes a éstos representan una “bomba de tiempo” y son un peligro real para la salud pública mundial, alertó World Animal Protection.
Una encuesta realizada por el organismo en 15 países, incluido México, reveló que 4 de cada 5 personas están preocupadas porque la próxima pandemia pueda originarse en los animales de granja y un número similar desconoce la amenaza que representan las superbacterias en las granjas industriales.
En el caso de nuestro país, 96% de los mexicanos muestra preocupación sobre la posibilidad de que una pandemia pueda originarse en los animales de granja.
Un reporte de World Animal Protection refiere que casi tres cuartos de los antibióticos existentes en el mundo son usados en la producción animal, la mayoría en granjas industriales que usan antibióticos para evitar las enfermedades que se generan por malas prácticas de bienestar, como el alto confinamiento de pollos de rápido crecimiento y la mutilación rutinaria en lechones.
Estos animales –añade– son mantenidos en condiciones estresantes y de hacinamiento, situación que crea un cultivo perfecto para la propagación de infecciones y la aparición de otras enfermedades. Este es un negocio riesgoso.
Advierte que cuando las superbacterias pasan de los animales a las personas, nos hacen menos capaces para enfrentar las enfermedades.
Hoy en día mueren 700,000 personas al año por infecciones que no pueden ser tratadas con antibióticos. Para el 2050, se espera que esta cifra aumente a 10 millones de personas por año.
A través de un comunicado World Animal Protection informó que contactó a tres de las principales asociaciones de productores de aves y cerdos de México, indagando sobre sus políticas y procedimientos que garanticen el uso adecuado de antibióticos en la producción animal; sin embargo, ninguno de ellos respondió.
Por otra parte al abundar sobre la encuesta realizada en México se obtuvo que 95% de los mexicanos muestra preocupación sobre la posibilidad de que las superbacterias provengan de animales de granja; 75% creen que los granjeros o productores deberían hacer más cuando se trata del problema de los antibióticos en animales de granja; y 77% están preocupados porque las superbacterias provenientes de animales, causen efectos adversos en la salud.
Además, 96% de los encuestados cree que los gobiernos deben monitorear y reportar los antibióticos usados en animales de granja y 87% de la gente cree que los antibióticos deben ser solo usados para tratar animales enfermos.
El gerente mundial del programa de animales de granja de World Animal Protection, Ricardo Mora, expresó que “si la pandemia nos ha tomado por sorpresa, la crisis de las superbacterias es una situación completamente predecible. No podemos ignorar la contribución que el uso excesivo de antibióticos en granjas industriales está teniendo en el aumento de la resistencia a antibióticos. Es una bomba de tiempo que podría empeorar la actual crisis si los antibióticos resultan ineficaces en el tratamiento de infecciones secundarias”.
El gobierno mexicano debe elevar los estándares de bienestar animal, y monitorear y reportar el uso de antibióticos en animales de granja. Igualmente, los supermercados deberían garantizar que los animales de su cadena de suministro sean tratados bien, y los antibióticos usados responsablemente en las granjas”
Monique Mikhail, estratega senior de Greenpeace International, dice: “La cría industrial de animales está destruyendo nuestros bosques, contaminando nuestra agua, calentando el planeta y dañando nuestra salud. Debemos poner fin a la cría industrial de animales y su inaceptable dependencia de los antibióticos, reducir drásticamente la cantidad de carne que producimos y comemos, y debemos hacer la transición a un sistema alimentario justo y ecológico.
World Animal Protection hace un llamado para ponerle fin a las granjas industriales, reducir la producción y consumo de productos animales provenientes de estas granjas y para garantizar que toda la producción de animales de granja restante cuente con altos niveles de bienestar.