Solicitan salario mínimo digno para 3 millones de jornaleros agrícolas de México
Aunque el trabajo de los jornaleros agrícolas para producir alimentos no se ha detenido durante la pandemia por Covid-19, el salario que hoy perciben en México no rebasa los 150 pesos por día, por lo que diversas organizaciones y especialistas solicitaron al gobierno de la Cuarta Transformación y en específico a la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami) fijar un salario mínimo digno de 300 pesos diarios para quienes realizan esta actividad.
Integrantes de la Alianza por el Campo Justo (ACJ) manifestaron que dicha percepción debe ser acorde con el costo que implica para una familia jornalera, de tres o más integrantes, cubrir necesidades vitales. Aunque se estima que los jornaleros en el país suman 3 millones, se debe considerar que siempre viajan acompañados por familiares, por lo que está cifra puede elevarse de entre 6 y 9 millones de migrantes que van a los campos agrícolas.
La directora ejecutiva de Fundar, Centro de Análisis e Investigación, Haydeé Pérez Garrido, expuso que desde hace unas semanas ACJ solicitó una reunión con diversas instancias del Poder Ejecutivo, la Presidencia de la República, las secretarías del Trabajo, de Agricultura, legisladores de todas las fuerzas parlamentarias y representantes del sector patronal y de trabajadores que conforman el Consejo de representantes de la Conasami, para analizar este tema.
Anotó que es importante que el Poder Legislativo no quite el “dedo del reglón”, ya que fue la instancia que aprobó reforma a Ley Federal del Trabajo de 2019 (artículo 280 Bis). Comentó que desafortunadamente no ha comenzado un diálogo con las instancias involucradas, por lo que hizo un llamado a autoridades a sostener encuentro para escuchar directamente a jornaleros agrícolas y puedan tomar decisiones en términos de justicia social.
La coordinadora de la Red Nacional de Jornaleros y Jornaleras Agrícolas (REJJA), Margarita Nemesio, destacó que la actual coyuntura política es un área de oportunidad, ya que en la Secretaría del Trabajo hay disposición para llegar a una política salarial justa y es muy probable que en la Conasami en los próximos meses se de una discusión sobre salarios mínimo general.
El hecho de que la Conasami fije un salario mínimo digno para jornaleros, sería un acto histórico y de justicia social impulsado por el gobierno de la Cuarta Transformación, señalaron.
Los integrantes de la Alianza por el Campo Justo hicieron énfasis en que un salario mínimo profesional permitirá dar un primer paso en el reconocimiento de los derechos de las personas que trabajan en actividades agrícolas y la garantía de condiciones de vida dignas.
Recordaron que de los 3 millones de jornaleros, 99% viven en condiciones de pobreza, marginación y desigualdad social y económica a causa de su bajo nivel de ingreso, lo que resulta insuficiente para cubrir sus necesidades básicas en salud, educación, condiciones laborales, vivienda y seguridad social.
El trabajo agrícola –refirieron– implica largas jornadas laborales; los riesgos de accidentes aumentan con la fatiga; están expuestos al uso de plaguicidas y falta acceso a servicios de salud básica. La mayoría de los jornaleros trabajan de manera temporal, sin contrato, y por estaciones, lo que conlleva a una constante movilidad y migración entre estados, generalmente de familias enteras. En los trabajos del campo, también hay un importante número de niñas, niños y adolescentes, así como mujeres y mujeres jóvenes con menores de edad.
La pandemia por Covid-19 visibilizó la relevancia los trabajadores agrícolas, quienes no tuvieron oportunidad de parar ante la crisis sanitaria y económica, y se evidenció la triple vulnerabilidad de esta población expuesta por la falta de garantía a sus derechos, por las condiciones de desigualdad permanente en la que viven y por la falta de reconocimiento de su trabajo como esencial.
La Alianza por el Campo Justo esta conformada por el Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, la REJJA y Fundar.
