El Programa Nacional de la Agroindustria de la Caña de Azúcar (PRONAC) proyecta poner en marcha cinco plantas de etanol para sustituir el aditivo oxigenante (MTBE) usado en las gasolinas, con lo que espera generar 25 mil empleos; además, otro objetivo es elevar la productividad del sector cañero y generar cerca de 96 mi empleos hacia el 2024.
El documento advierte que de continuar la tendencia actual, la industria de la caña de azúcar enfrentará una nueva crisis de sobre producción y bajos precios, debido a la contracción en el consumo interno y la sustitución que hace la industria de este insumo por edulcorantes bajos en calorías. Esto acentúa la necesidad de exportar excedentes, los cuales sólo en el ciclo azucarero (2018-2019) representaron 37.4% respecto a la producción de azúcar total nacional.
Ante este escenario el gobierno de la Cuarta Transformación recurre a un viejo planteamiento que hasta ahora no ha fructificado en todo su potencial: la diversificación de la industria cañera, concentrada en la producción de etanol como aditivo oxigenante para gasolinas.
Si se produce más caña para usos alternos como el etanol, los empleos podrían incrementarse cuando menos 15% en 2024. Para el 2022 podrían estar operando cinco plantas de etanol, generando 25 mil empleos directos e indirectos en el campo mexicano”, detalla el PRONAC 2020-2024.
El proyecto que se envío a la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (Conamer), expone: la producción de etanol a partir de caña de azúcar puede ser la alternativa sostenible para la diversificación de la agroindustria cañera. Tiene un amplio potencial de mercado para sustituir el MTBE usado en las gasolinas y que hoy se importa de Estados Unidos.
“Aprovechar la caña de azúcar para otros fines como la producción de bioetanol podría generar más empleos en el campo mexicano, aumentar el ingreso de los productores agrícolas y contribuir a reducir los índices de pobreza y pobreza extrema entre los pequeños productores del campo mexicano”.
Con una serie de metas y objetivos en materia productiva –por ejemplo aumentar 2% anual el rendimiento en el campo cañero– y social, el PRONAC proyecta que para el 2024, el porcentaje de personas productoras de caña de azúcar que viven en situación de pobreza extrema se reduzca 4%, que sumarían 95,815 personas, con respecto a la población en ese estado que había en 2018 (2,395,390).
Cabe recordar que México realiza exportaciones de azúcar hacia los Estados Unidos, las cuales superan el millón de toneladas en el marco del T-MEC, pero tuvo que negociar acuerdos de suspensión con su contraparte estadounidense para evitar que se realizará una investigación por dumping que afectará al sector azucarero nacional, la cual esta vigente. Sin embargo, cuando tiene más excedentes de producción tiene que enviarlo al mercado mundial donde el precio es muy bajo.
Según el PRONAC,
una agroindustria de la caña de azúcar diversificada podrá participar en mejores condiciones económicas, sociales y ambientales en el sector agrícola del país, mantener o incrementar el número de empleos en el campo y mejorar el ingreso de los productores agrícolas dedicados a esta actividad”.
La agroindustria de la caña de azúcar es un importante motor económico de México, con más de 800 mil hectáreas cultivadas con caña de azúcar en más de 267 municipios de 15 entidades, que suman una población de 17,730 millones de personas, de las cuales 35% depende de la agroindustria que procesa la caña de azúcar.
Datos del Consejo Nacional de Evaluacion de la Politica de Desarrollo Social (Coneval) y el Comité Nacional para el Desarrollo Sustentable de la Caña de Azúcar (Conadesuca) indican que de la agroindustria de la caña de azúcar dependen en México 6 millones 222 mil 300. La meta del PRONAC para 2024 es incrementar un 1. 3% el porcentaje de personas que dependen de la agroindustria en territorio nacional.
