Darán orientación nutricional a más de 25 millones de beneficiarios de Diconsa y Liconsa
Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex) y el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) aconsejarán nutricionalmente a más de 25 millones de personas que acuden a las más de 25 mil tiendas comunitarias y más de 10 mil lecherías a nivel nacional.
Esto como parte del convenio general de colaboración entre ambas instituciones, se brindará asesoría técnica, científica y médica a personal de Segalmex para que, a su vez, impartan orientación nutricional a la población en situación vulnerable que es atendida mediante los programas de Abasto Rural de Diconsa y Abasto Social de Liconsa.
El director general de Segalmex, Ignacio Ovalle Fernández, y su homólogo en el INSP, Juan Ángel Rivera Dommarco, coincidieron en la necesidad de orientar a la población con respecto a una alimentación saludable y nutritiva que permita reducir comorbilidades como diabetes, obesidad y enfermedades cardiovasculares.
Ovalle Fernández resaltó que la calidad nutricional está presente en los productos de la canasta básica y la leche que surten Diconsa y Liconsa.
Comentó que ahora se requiere un diálogo con la población beneficiaria para reorientar los hábitos alimenticios, “y por esa razón nos apoyamos en el Instituto Nacional de Salud Pública”.
Rivera Dommarco destacó la necesidad de
recuperar las tradiciones alimenticias y nutricionales de la población y regresar al consumo de leguminosas y oleaginosas, así como la tortilla, aprovechando, además, el acceso que tiene el país a frutas y verduras, que lo diferencia de otras naciones.
Anotó que México es uno de los países que más ingiere bebidas azucaradas y consume comida chatarra.
“Una de cada tres calorías proviene de productos procesados y 20 por ciento de alimentos de baja calidad, lo que significa que debemos modificar nuestra dieta para evitar enfermedades que causan alto grado de mortalidad”, dijo.
Expresó que, mediante la celebración de este tipo de convenios, el Instituto puede cumplir su misión de contribuir al mejoramiento de la alimentación de la población para evitar epidemias crónicas como obesidad, diabetes e hipertensión y el deterioro del medio ambiente.
Fuente: Sader